Tutor simuló un «proyecto de investigación» con trabajadores fantasma con nombres y apellidos que empezaban con las letras de los tres partidos
25 jun 2014 . Actualizado a las 11:52 h.Para que la maquinaria estuviera bien engrasada, José María Tutor, el responsable de Vendex en Galicia, hacía periódicamente una excursión por media comunidad para la supuesta distribución de mordidas. Dicen los de Vigilancia Aduanera que este hombre, sobre el que pesan varias imputaciones, bautizó ese recorrido como la ruta del bacalao. «No fue otra cosa -aclaran los de Aduanas- que recorrer las principales ciudades gallegas para «el último día -se refieren a que las elecciones municipales estaban ya a la puerta- distribuir el dinero trasladado desde Madrid para su entrega».
A Tutor lo pillaron varias veces hablando con su mujer, también imputada, de esta ruta. «¿Y si no hay conejo qué haces?», pregunta la esposa. «Que hay... Que te digo que hay... Está todo el mundo muy receptivo». Tan receptivos estaban que quienes no le pillaban el teléfono al instante lo hacían luego con rapidez. «La gente no me coge el teléfono al momento, pero en cinco minutos me devuelven la llamada. No hay fallo. No hubo ninguno que no devolviera la llamada», contestó el esposo.
Pero esta infraestructura no se pone a andar de la noche a la mañana. Antes de nada, según Aduanas, Tutor desarrolló el denominado «proyecto de Investigación» y se lo presentó al jefe supremo. Consistía en untar a políticos, cargos y funcionarios.
Información encriptada
En los registros llevados a cabo en oficinas de Vendex aparecieron dos hojas con información encriptada. En una de ellas aparecía una relación de «trabajadores que van a darse de alta en el nuevo proyecto de investigación». Con el número uno figuraba Pedro Pérez; con el dos, Benito Nogueira González, y con el tres, Pablo Santos Orgueira Estévez.
Los de Aduanas bucearon en todos los archivos de la Agencia Tributaria, en los del INEM y en otros más para conocer detalles sobre esos trabajadores, pero los resultados fueron totalmente negativos. No existían. Eran operarios fantasma.
Pero una conversación mantenida entre Tutor y su jefe, Rodríguez Acosta, les abrió los ojos. El gallego le explicaba al cubano con mucha paciencia que repararse en las iniciales de cada uno de los apellidos. Pedro Pérez (PP), Benito Nogueira González (BNG) y Pablo Santos Orgueira Estévez (PSOE).
La segunda hoja incluía el nombre de cada una de las ciudades que figuraban en la ruta del bacalao, y al lado, las cantidades asignadas a cada partido. Dice Aduanas que está acreditado que Tutor mandó esos documentos a su jefe por fax «recurriendo a ese sistema encriptado ante la imposibilidad de encontrar un hueco en esas fechas para hacer tal gestión de forma personal, hecho este que es indicativo del dolo o malicia con el que se va a llevar a cabo la inversión según la ciudad y el tipo de contrato» a los diferentes «trabajadores que van a darse de alta en el nuevo proyecto de Investigación».
En plena campaña electoral, esperaron al último momento. «¿Pero, cómo se ha demorado tanto en eso?», le preguntó el cubano al gallego.