Feijoo: «Santiago se lo merece»

m. cheda SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

El presidente de la Xunta prescinde de una pieza clave en su Gobierno para escenificar su «compromiso» con Compostela, mientras la oposición reacciona crítica al cambio

29 sep 2015 . Actualizado a las 16:47 h.

No es nada amigo Feijoo de realizar cambios en su Gobierno. De hecho, en los más de cinco años que lleva al frente de la Xunta, solo había efectuado dos: uno menor, un canje de titular en Industria en plena transición de la primera a la segunda legislatura, y uno forzado, en enero del 2012, cuando Rajoy lo dejó sin un par de sus conselleiras y aprovechó para reducir de diez a ocho las carteras del Ejecutivo. Ahora afronta otro, aunque en realidad se trata del primero llevado a cabo por decisión propia y encontrándose su Gabinete en ejercicio. Además, este afecta a una pieza clave en el organigrama. Tanto en el de San Caetano, pues allí Agustín Hernández ocupa de facto -tras Alfonso Rueda- el tercer puesto del escalafón, como en el del partido, dado que el futuro alcalde de Santiago ascendió hace 17 meses a vicesecretario xeral del PPdeG. En ese contexto se entiende que la operación salida de Currás, para el mandatario popular, supone un verdadero sacrificio, algo extraordinario, muy poco suyo. Es también, después de cometer errores de mando en los últimos meses, una especie de redención, un retomar el timón, una forma de escenificar su «compromiso» con Compostela, una plaza que a los conservadores les costó un cuarto de siglo conquistar y en apenas tres años han tirado casi por la borda. De ahí que, recién confirmada la renuncia del regidor, preguntado por cómo era que se desprendía de Hernández, Feijoo confesase ayer: «Santiago se lo merece». En sus antípodas, entretanto, la oposición reaccionó con ácidas críticas al nuevo baile de primer edil en la capital de la comunidad. La secretaria de Organización del PSdeG, Pilar Cancela, aplaudió el «positivo» cese del alcalde saliente, si bien afeó «que non se tivera producido antes», así como la actitud escapista del presidente de la Xunta «en todo este vodevil». Además, advirtió: «Isto, de momento e por desgraza para a cidadanía, aínda non rematou. Pensamos que todavía nos queda algún capítulo por ver». La segunda de Besteiro, asimismo, recordó que el relevo en el Pazo de Raxoi es más producto de los tribunales que de los despachos de la política. «En realidade, non é -arguyó- que o quixeran facer, é que estaban obrigados a mover ficha tras unha masiva condena xudicial a edís por prevaricación». La viceportavoz de Alternativa Galega de Esquerda (AGE), mientras, calificó el movimiento de «falta de respecto á cidadanía». «Non é serio o que están a facer en Compostela. A corrupción e a crise institucional da cidade vai afectar directamente mesmo ao Goberno de Galicia. É algo insólito», lamentó Yolanda Díaz. «Ao final -apostilló-a conclusión é que o desgoberno de Santiago espállase á Xunta». Para el portavoz nacional del Bloque, lo ocurrido representa «o remate final de unha operación de arrase dos principios democráticos máis elementais», «un plan perfectamente calibrado e concebido polo PP para silenciar á cidadanía ante a xestión calamitosa e corrupta do Concello». No en vano, Xavier Vence sostiene que Feijoo ha demorado premeditadamente su intervención en el caso para que legalmente, a menos de un año de las municipales de mayo del 2015, ya no resulte posible convocar elecciones en Compostela. «A corrupción institucionalizada do PP aprópiase así do goberno da cidade, poñendo a dedo persoal á marxe de procesos electorais», denunció el líder del BNG. Al contrario que el resto de partidos, Podemos, cuarta fuerza en la comunidad en los recientes comicios europeos, eludió pronunciarse sobre la noticia. Su portavoz gallega, Marina Rey, alegó: «No hemos conformado una opinión al respecto». Sí la tienen -y contundente- los grupos municipales con representación en la corporación local. El del PP, por boca del propio Currás, justificó su forzada caída aduciendo que «una situación excepcional requiere una solución excepcional», en tanto que el jefe del socialista, Francisco Reyes, instó a los conservadores a cubrir las vacantes generadas en sus filas (al menos nueve) con candidatos incluidos en la lista de las elecciones del 2011, no con concejales no electos. El portavoz nacionalista, Rubén Cela, también censuró el recurso a esa figura de representación. Y reprochó a Feijoo la «absolutamente rocambolesca» situación, amén de rebajar a Currás y a su antecesor, Gerardo Conde Roa, a «alcaldes que pasarán á historia como os peores». relevo en santiago