Dos trabajadoras, condenadas a tres años de cárcel por echar pintura a una piscina en la huelga del 2010

L. P. PONTEVEDRA / LA VOZ

GALICIA

Además, se les impone el pago de 609 euros por la reposición de agua, 409 por la limpieza de las bancadas y 125 por los desperfectos en la ropa del gerente del complejo

01 may 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Dos trabajadoras de la empresa Serviocio, que gestiona las piscinas de Campolongo, en Pontevedra, han sido condenadas a tres años y un día de prisión y al pago de multas por arrojar pintura a la piscina olímpica de Pontemuiños en la huelga del 2010. Además, se les impone el pago de 609 euros por la reposición del agua, 409 por la limpieza de las bancadas y 125 por los desperfectos que la pintura ocasionó en la ropa del gerente del complejo.

Se considera acreditado que formaban parte del piquete que, en la mañana del 8 de febrero, irrumpió en las instalaciones cuando se encontraban tres socorristas, un empleado de recepción y cuatro personas de dirección. «Movidas por la intención de obligar a las personas que allí se encontraban trabajando a secundar la huelga [...], empujaron al gerente del complejo y comenzaron a proferir gritos de ??esquiroles??, al tiempo que arrojaban pintura de color rojo y jabón líquido al agua de la piscina y a las gradas», refiere la resolución.

Inicialmente, el Juzgado de lo Penal número 3 impuso seis meses de cárcel y multas. Las trabajadoras recurrieron buscando la exoneración y la Fiscalía de Pontevedra hizo lo propio, pero con el objetivo de lograr un castigo mayor. Y lo logró. La Audiencia de Pontevedra ha hecho recaer todo el peso de la ley sobre ambas. Los tres años es la pena máxima que prevé el Código Penal para aquellas personas que, «actuando en grupo o individualmente, pero de acuerdo con otros, coaccionen a otras personas a iniciar o continuar una huelga». La Sala Segunda considera que «a violencia física empregada polas acusadas -empurrón ao xerente das instalacións para vencer a súa resistencia a que o grupo do cal formaban parte aquelas entrase na zona da piscina-, a forza nas cousas mediante o lanzamento de pintura de cor vermella e xabón líquido ás bancadas e á auga da piscina» conllevaron una «intimidación grave» hacia quien no secundaba la huelga.

Esta sentencia ha provocado la indignación en CC?.OO. pues implica el ingreso en la cárcel de dos mujeres sin antecedentes penales. Ramiro Otero, secretario general de la federación de servicios de CC.?OO., recordó que la huelga del 2010 «foi normal, con absoluta tranquilidade e non houbo denuncias naquel momento por ningunha das partes por actos de violencia». Encuadró la resolución «nun ataque máis ao dereito á folga».