La Guardia Civil constató que los tres siniestros ocurrieron cerca del domicilio de los implicados
24 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.El Grupo de Investigación de Accidentes de Tráfico (GIAT) de la Guardia Civil de Pontevedra ha sacado a la luz lo que se sospecha que es un nuevo fraude a las compañías de seguros mediante la presentación de reclamaciones por accidentes de circulación inexistentes. Por el momento, hay una decena de personas que ya están imputadas y se ha puesto la lupa sobre tres supuestos siniestros de circulación ocurridos en el entorno de Pontevedra en distintas fechas del año 2013.
Los investigadores del instituto armado, tras meses de indagaciones, han determinado que todos estos siniestros mantenían una serie de pautas comunes que, a la postre, les llevaron a concluir que los accidentes no llegaron a producirse. Por lo de pronto no se tuvo constancia de intervención policial alguna, así como tampoco se ha podido determinar que por los implicados se requiriese la presencia de grúas que se hicieran cargo de los vehículos supuestamente implicados, ni de los servicios sanitarios. Y eso a pesar de que, en teoría, se habrían registrado heridos.
De esta manera, el modus operandi habitual consistía en la notificación a la compañía del seguro de una colisión por alcance en la que un turismo, en el que iban uno o dos ocupantes, impactaba por detrás con un segundo automóvil, en el que viajaban cuatro o cinco personas. Las pesquisas posteriores de la Guardia Civil determinaron que unos y otros o bien mantenían relaciones familiares, o bien de convivencia, o eran allegados o amigos. De hecho, los impactos se produjeron en las inmediaciones de los domicilios de alguno de los imputados.
Todo parece indicar que lo que hizo saltar todas las alarmas fue el hecho de que, a pesar de que los desperfectos sufridos en los turismos eran de carácter leve -prácticamente, es lo que se conoce como chapa y pintura-, los ocupantes de los mismo siempre resultaban con algún tipo de lesión. A esta circunstancia se sumó el hecho de que solo uno de los dos automóviles -el que, presuntamente, resultaba alcanzado- era el que presentaba algún tipo de daño a raíz del choque.
Características similares
En principio, la Guardia Civil ha descartado que se puede hablar de una organización o grupo criminal. En este sentido, las fuentes consultadas se decantaron por hablar de tres sucesos independientes, aunque de características similares. Esta circunstancia determinará que, por parte de las autoridades judiciales pontevedresas, se instruyan tres procedimientos diferentes que den lugar, si así lo cree conveniente la Fiscalía de Pontevedra, a otros tantos juicios.
Fuentes del sector del seguro resaltaron que este tipo de fraudes están a la orden del día, si bien en ocasiones es muy difícil de demostrar aunque se tengan indicios. Solo en el 2012, la provincia de Pontevedra contabilizó un total de 3.559 de tentativas de estafa, en su mayoría se trató de lo que Unespa define como «timos no profesionales».