Pasada la Semana Santa, las expectativas del sector turístico están puestas ahora en el puente del 1 de mayo, que tendrá lugar a partir del jueves de la semana que viene. Al igual que ocurrió el jueves y viernes santos, el tiempo será decisivo a la hora de que los hoteles de la comunidad estén más o menos llenos.
De momento, aunque aún falta más de una semana, las previsiones apuntan a que las bajas presiones podrían estar presentes en el inicio del puente festivo. De momento, la probabilidad de precipitaciones el miércoles es del 80 % y no parece que vaya a haber un cambio de tendencia inmediato.
Un empeoramiento del tiempo se empezará a notar a partir de este viernes, cuando una profunda borrasca se situará al sur de Irlanda, lo que dejará en la comunidad lluvias intensas, especialmente en la provincia de Pontevedra. El sábado y el domingo las condiciones meteorológicas seguirán siendo adversas.