La oposición reclama un plan de reforma de la carretera que ha llegado a acumular este año casi medio millar de baches entre Santiago y A Coruña
12 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.La fuga de usuarios de la autopista del Atlántico (su intensidad media diaria pasó de 27.030 vehículos en el 2007 a 18.309 en el 2013) ha devuelto a la nacional 550 que une A Coruña con Tui un volumen de tráfico del que se había librado hace años. Por ello los grupos de la oposición reclamaron ayer también en el Congreso, a instancias del BNG, un plan global de reforma de la carretera que ha llegado a acumular este año casi medio millar de baches entre Santiago y A Coruña.
«Esta carretera no está en condiciones para soportar su tráfico actual tanto por el estado de su firme como porque atraviesa núcleos de población sin que se haya reforzado su seguridad», argumentó la nacionalista Rosana Pérez en su defensa de un plan integral para la N-550 y su prolongación a la N-651 hasta Ferrol. El popular Telmo Martín cifró en 1,5 millones la inversión realizada por Fomento en mantenimiento en los dos últimos años, añadiendo 292.000 euros más para una reparación urgente que se está llevando ahora a cabo.
Eso sí, el popular expresó en boca de Fomento la intención del ministerio de desarrollar proyectos de rehabilitación del firme, pero siempre «según las disponibilidades presupuestarias» en los tramos A Coruña-Ordes, Ordes-Santiago, Santiago-Padrón y Pontevedra-Redondela.
Según el diputado pontevedrés, la N-550 será objeto de una futura transformación con la integración de las variantes de Ordes, Pontecesures, Valga, Sigüeiro y Padrón, en fase de estudio o arranque de redacción de proyecto.