La mayor parte de las depuradoras gallegas no desinfectan sus vertidos

GALICIA

Pocas tienen tratamiento terciario y algunas lo apagan por su consumo excesivo

13 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

«La mayor parte de las depuradoras de nuestro entorno carecen de tratamiento terciario y, por tanto, no desinfectan sus vertidos», afirma Ricardo Beiras, director de la Estación de Ciencias Marinas de Toralla. Agrega que algunas de las que lo poseen, «no lo ponen en marcha por su alto consumo energético». El tratamiento terciario, por lámparas ultravioleta, permite eliminar por completo la contaminación microbiológica por aguas fecales.

Veamos un caso concreto. A la depuradora de Cangas se le instaló el terciario en el 2008. «Pero está cascado. Nunca funcionó porque el Gobierno que lo puso lo dejó ahí, sin más», explica José Enrique Sotelo, alcalde de la villa, que se ha comprometido a sacar a concurso antes del verano toda la gestión del agua del municipio. «Las lámparas valen un pastón y el coste anual es de 60.000 euros».

Los concellos pequeños lo tienen complicado para poner en marcha el terciario, pero Cangas ejemplifica además el principal problema de la depuración en Galicia: «El agua que llega a la depuradora sale bastante bien, pero es que solo entra el 10 %». El resto se va a la ría «por los aliviaderos de las bombas», dice Sotelo. El asunto, según Beiras, es que, en ocasiones, «moluscos y otros mariscos se ven muy afectados por esta contaminación».

Vigo se prepara para inaugurar en este primer trimestre del año la nueva EDAR del Lagares, que incrementa notablemente la capacidad de depuración de la ciudad. Pero el problema, según la Plataforma en Defensa da Ría de Vigo, no está en la EDAR, sino en la red. Al no haber separación de aguas pluviales y fecales, cada vez que llueve desbordan los aliviaderos y la mezcla sale libremente a la ría. «Casi el 80 % de los aliviaderos de los pozos de bombeo vierten sin depuración, y eso no lo va a solucionar la nueva estación», explica Serxio Regueiro, portavoz de la plataforma. Esta prepara un informe «sobre los vertidos» en la ría de Vigo que remitirá a la Xunta, pero también al Parlamento Europeo. «Es una verdadera vergüenza. La mayoría de las salidas están cerradas con marea baja, pero abren cuando sube. Además, de noche se paran muchas estaciones de bombeo y también se vierte», avanza Regueiro sobre el contenido de su trabajo.

La nueva EDAR de Vigo incorpora tratamiento terciario para desinfectar las aguas. Funcionará desde el principio, pero únicamente para actuar sobre la contaminación microbiológica. Se deja fuera, al menos hasta finales del 2015, la opción de tratar el nitrógeno y el fósforo, otra cuestión clave.

A Xosé Antón Álvarez, investigador científico del CSIC, le pidieron en el 2007 que estudiase las cargas no naturales de esos dos elementos para ver las necesidades reales de la futura depuradora. Su trabajo reveló que el 17 % del nitrógeno y el 25 % del fósforo de esa ría no es de producción marina, sino que llega por las redes de saneamiento. «Es un diagnóstico límite con un pronóstico preocupante», pues el descenso de las nortadas en los últimos cincuenta años ha hecho que la ría renueve el agua «cada dos semanas en vez de cada siete días». Un exceso de esos elementos se traduce en «aguas con poco oxígeno y, por tanto, inhabitables si el problema no se corrige».

En general, catedráticos de Ecología, biólogos e ingenieros, creen que mil millones de euros desde el año 2000 deberían traducirse en una red de aguas sanitarias bastante más completa de la que Galicia posee. Hay incluso algunas poblaciones importantes que de momento siguen sin depuradora.

Es el caso de Malpica, un municipio con 5.800 residentes. Un problema político revocó la adjudicación de la estación en el 2009. Volverá a licitarse en el primer semestre del año en curso y costará 5 millones.

A la vista de todo esto, «es evidente ?argumenta Victoriano Urgorri, catedrático de Bioloxía Mariña de la USC?, que los tres eurodiputados que acaban de redactar el informe sobre las rías gallegas vinieron de visita turística, porque las conclusiones son una carallada». Los miembros de la Plataforma en Defensa da Ría de Vigo acaban de remitir una carta de felicitación y agradecimiento a los dos que se negaron a firmarlo.

Dudas sobre el saneamiento de Ferrol

Si nada se tuerce, Ferrol contará este año con la depuradora por la que pelea desde hace dos decenios. De momento, las fecales van a la ría. Pero el caso es que no se tuerza. Parte de la nueva instalación, incluida la EDAR de Prioriño, lleva varios años construida y la cuestión es ver si ahora funciona.

«Dudo que la estación de bombeo de A Cabana llegue a funcionar», sostiene el catedrático Victoriano Urgorri. Algunos ingenieros intuyen también algunos problemas en el proyecto. La instalación de la margen norte de la ría tiene 16 tanques de tormenta «no adaptados a la red separativa que sí posee el concello de Ferrol, por lo que mezclan aguas pluviales y fecales», explica José María Hernández, del colectivo Cidadáns Versus Tanque de Tormenta.

«Nuestros ingenieros ?prosigue? dicen que, cuando empiece a llover, en 3 o 4 minutos comenzará a aliviar el sistema por esos tanques. Además, su capacidad total es de 20.000 metros cúbicos y se necesitarían tres o cuatro veces más». El resultado, según esto, sería el de constantes vertidos a la ría, que, «para nuestros biólogos, seguiría siendo de zona B o C» por contaminación microbiológica.

«Los recursos se agotan», advierte Urgorri. El catedrático cifra en unas dos mil las «especies marinas desaparecidas en la ría desde 1974» y calcula que harán falta al menos «cinco años» para limpiar las rías de materia orgánica cuando estén en funcionamiento «todas las depuradoras».

Hay zonas en Ferrol con valores de E. Coli que son «el doble de los permitidos». «Es inconcebible lo que se ha hecho con todo esto en Galicia, que depende tanto del mar», agrega.