Un policía se sube a un coche en marcha en Santiago para auxiliar a un conductor en parada cardíaca

M. S. / J. C. Redacción / la voz

GALICIA

El vehículo circulaba de forma descontrolada por San Caetano

09 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Quienes el martes por la tarde transitaban por el barrio de San Caetano, en Santiago, pudieron asistir a una escena que bien podría formar parte de una película policíaca. La secuencia de los hechos comenzaría con una mujer llamando alertada al 091 porque un individuo que circulaba por la vía parecía sentirse indispuesto y pilotaba de forma descontrolada.

Los agentes de una patrulla de la Policía Nacional, que realizaban su trabajo por esa zona en la que se encuentran buena parte de los servicios administrativos de la Xunta, se bajaron enseguida del coche patrulla y se dirigieron al lugar indicado por la mujer. Una vez allí, comprobaron que la persona que viajaba en el vehículo tenía los ojos abiertos pero no respondía a ningún estímulo. Entonces, uno de los policías decidió introducirse en el automóvil para pararlo y asegurarlo. Una vez que logró estabilizar el coche, su compañero le ayudó a sacar al hombre indispuesto y a tumbarlo sobre la calzada.

Maniobra de reanimación

Según explica una nota hecha pública por el Cuerpo de la Policía Nacional, tras comprobar que carecía de pulso y que no respiraba, los agentes procedieron a realizar al conductor la maniobra de reanimación cardio-pulmonar. Se da la casualidad de que en ese momento una enfermera pasaba por la zona y colaboró también en esos primeros auxilios que pudieron resultar decisivos para mantener al hombre con vida, pues la intervención, seguida de un masaje cardíaco, posibilitó la apertura de las vías respiratorias, según destaca el comunicado policial.

Las tareas de reanimación del conductor se prolongaron durante varios minutos hasta que los servicios sanitarios llegaron al lugar y el hombre, de 67 años de edad, pudo ser trasladado hasta un centro sanitario compostelano en ambulancia. Allí se recuperaba todavía ayer del percance. Su pronóstico, según la nota hecha pública ayer, es estable.