En pocos días, la Consellería de Sanidade espera tener listo el decreto que regulará la puesta en marcha de las áreas de gestión clínica, para poder implantarlas a partir de enero. La Administración cree que puede suponer una mejora en la atención a los pacientes, pero los sindicatos ven con recelo un sistema que creen que será un paso más hacia la privatización de la sanidad.
¿Qué son las áreas de gestión clínica?
Félix Rubial, director xeral de Asistencia Sanitaria y responsable del proyecto, explica que «non son máis que unha forma de organización da asistencia sanitaria en función da maneira na que enferman os pacientes. Ata agora facíase según as especialidades dos médicos, agora trátase de implantar outro modelo».
¿Cómo funcionarían?
Existe algún precedente, como el área de salud mental en Ferrol. Una vez definida el área, se aglutina en torno a ella a profesionales de todas las especialidades relacionadas, así como a personal técnico o de enfermería. Esa estructura no implica que todos los servicios y trabajadores tengan que concentrarse. «É perfectamente viable que haxa profesionais de disciplinas diferentes e de hospitais diferentes», explica Rubial.
¿Cuáles son las ventajas de las áreas de gestión?
El director xeral deja claro que se trata de una herramienta organizativa más, pero que «non son a panacea», aunque cree que beneficiarán a los pacientes: «Ofreceráselles unha atención integral e romperase coa dinámica da especialización, evitando as peregrinaxes por diferentes centros». La principal ventaja sería que «as decisións sobre patoloxías complexas teñen que tomarse en equipo». Desde el sindicato médico O?Mega tienen una opinión opuesta. Su presidente, Víctor Crespo, apunta que este tipo de organizaciones pueden crearse a partir de la normativa actual. De hecho, recuerda que ya existe alguna experiencia en funcionamiento, como el área de corazón en A Coruña. «¿Por qué tenemos que tener una normativa específica?», se pregunta.
¿Cuándo se pondrán en marcha?
El proyecto está en la fase final de asesorías y filtros jurídicos. La creación de las áreas de gestión clínica se regulará a través de un decreto que Félix Rubial espera que esté listo este mes. No se conoce cuántas áreas se crearán inicialmente, pero la intención de la consellería es que de partida sean tres por cada una de las siete áreas sanitarias que hay en Galicia. Para tratar de evitar su implantación, la coalición CESM-O?Mega ha convocado una huelga en la sanidad pública para el 9 y el 10 de diciembre, convocatoria a la que CC.?OO. y la CIG se han sumado.
¿Podría ocurrir que coexistiesen profesionales que integrasen una determinada área y otros que quedasen al margen?
Dado que la incorporación de los profesionales a las áreas es voluntaria, podría ocurrir perfectamente. Sin embargo, la Xunta no tiene en mente esa posibilidad. «Cústame traballo pensar que se vaian formar áreas e que non sexan aceptadas. Confiamos no efecto arrastre», asegura el responsable de Asistencia Sanitaria, quien al mismo tiempo asegura que no se va a permitir «que haxa áreas que non conten coa aceptación case unánime dos profesionais».
¿El hecho de que se ofrezcan incentivos al recorte de gastos puede incidir sobre la calidad asistencial?
Para Rubial, la respuesta a esta pregunta es un no rotundo. De hecho, argumenta que «os incentivos existen na sanidade desde hai moito tempo e están vinculados a garantir un determinado nivel de calidade». Es más, asegura que las áreas de gestión clínica llevan aparejada una encuesta de clima laboral y otra de satisfacción de los pacientes. Sin embargo, desde O?Mega alertan de que «en la teoría, el paciente tiene la mejor atención, pero las áreas de gestión van a trabajar con un presupuesto que ya nos han dicho que no va a ser mayor». «Nunca hemos visto poner tanta carne en el asador», apostilla Crespo.
¿Suponen las áreas un paso hacia la privatización?
Según Rubial, estos departamentos no se privatizarán y serán dirigidos por profesionales sanitarios. Sin embargo, para O?Mega, las áreas de gestión clínica son «una forma encubierta de privatización». Víctor Crespo dice que la propia consellería está lanzando el mensaje de que deben convivir lo privado y lo público. Además, como la normativa quedará a expensas de decretos de índole superior, no ven garantías contra la privatización. En este punto incide CC.OO., que alerta «da fragmentación dos hospitais, que se descapitalizarán mediante microempresas [...] sempre á procura dun único interese: os beneficios económicos». Por su parte, CIG-Saúde ha solicitado que se publique la norma que regulará la convocatoria para la dirección de esas áreas, y reclama la regulación de la participación del personal estatutario.