«Que Beiras le vino de perillas a Feijoo, hoy ya no lo duda nadie»

La Voz

GALICIA

28 sep 2013 . Actualizado a las 06:00 h.

El aún líder del PSdeG confiesa que le queda el sinsabor de no lograr ser presidente de la Xunta, algo que ya no ambiciona.

-¿Deja el cargo con algún sinsabor?

-Quizás únicamente con uno, que me gusta ganar a todo. El único sinsabor es que creo que había un equipo ganador, pero las circunstancias eran imposibles, era muy difícil remar a contracorriente...

-¿Pero se vio de presidente de la Xunta en algún momento?

-Sí, sí, todos teníamos encuestas que decían que las cosas estaban muy afinadas. No hay que olvidar que Feijoo perdió 125.000 votos, pese a que ganó tres diputados más, porque la potencia de fuego mediático de la derecha alimentó una confrontación que al final favoreció al PP.

-¿Acaso cree que no ganó por la irrupción de Beiras?

-No, no digo eso, pero que Beiras le vino de perillas a Feijoo, hoy no lo duda nadie, aunque esa bipolarización hinchada mediáticamente por la derecha es un tema micro. Lo importante es que la izquierda tiene un gran desafío por delante, que consiste en decir cosas que se complementen y que no nos ataquemos entre nosotros, porque el desgaste de la derecha y el de Feijoo están garantizados.

-Al lado de la escandalera que se vive últimamente en el Parlamento, ¿cree que se quedó cortó cuando hizo temblar O Hórreo con aquello de que «Feijoo y el narcotráfico están ahí ahí»?

-Visto lo visto, creo que estaba mucho más que ahí ahí, y la gresca del Parlamento le viene de perlas a la derecha. Cuando hicimos ese proceso de la ciudadanía contra Feijoo con el caso Marcial Dorado, la noticia que dio la vuelta a España fue el puñetazo de Beiras, y eso le permitió a Feijoo escaparse escondiéndose detrás del puñetazo y echando por tierra cientos de horas de trabajo de la oposición.

-¿Cuál es la ambición política de alguien que fue alcalde, conselleiro y secretario general? ¿Las Cortes, Estrasburgo?

-Mis ambiciones las tengo claras, intenté ser buen alcalde, ser buen conselleiro y un buen secretario general, ahora voy a intentar ser un buen parlamentario. Estaré en el Parlamento madrugando mucho. Eso es todo.