Garzón Amo cambia por tercera vez de abogado y ahora confía su defensa al Semaf

x. m. santiago / la voz

GALICIA

22 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El maquinista del tren Alvia que el pasado 24 de julio descarriló en Angrois (Santiago) ha cambiado de abogado por tercera vez desde que fue imputado como responsable de haber provocado el siniestro en el que murieron 79 personas y 150 resultaron heridas.

Francisco José Garzón Amo, que admitió haberse despistado al entrar a 190 kilómetros en la curva de A Grandeira, que está limitada a 80, fue en un principio asistido por la abogada Andrea Roura, que lo acompañó en su declaración ante la Policía Nacional y en los primeros momentos tras el accidente. Posteriormente, la letrada fue sustituida cuando Renfe Operadora llegó a un acuerdo con el despacho internacional DAC Beachcroft, cuya sede central está en Londres pero que tiene delegación en Madrid, para fichar al prestigioso abogado Paulino Fajardo.

Andrea Roura forma parte de esta misma empresa de letrados, pero Paulino Fajardo está considerado como un experto en este tipo de asuntos porque fue el abogado defensor de Spanair en el caso del accidente aéreo que esta compañía sufrió hace cinco años en Madrid-Barajas.

Sin embargo, Garzón Amo no debía de sentirse cómodo con su abogado por mucho prestigio que tenga, ya que ha vuelto a cambiar de letrado y esta vez ha confiado su defensa al Sindicato Español de Maquinistas y Ayudantes Ferroviarios (Semaf), al que pertenece.

El Semaf ha puesto a disposición del maquinista del Alvia que descarriló en Angrois un equipo de letrados formado por Manuel Prieto Romero, Pedro Vela Fernández-Maqueda y Julio Santos.

El nuevo equipo ya ha estado presente en las declaraciones de los cinco miembros del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) que han declarado esta semana en calidad de imputados por el juez que instruye el caso, Luis Aláez. Y, según algunos de los letrados presentes, se han mostrado más agresivos que las anteriores defensas de Garzón Amo.