Un paciente de Santiago lleva desde junio del 2009 en lista de espera de traumatología para pasar por el quirófano
01 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Constantino Silva, Tino, un vecino del barrio de Pontepedriña, en Santiago, agotó su paciencia hace más o menos un año. Y eso que hasta entonces aguardó pausadamente a que le dijesen qué día podría pasar por el quirófano. Tino tiene pies cavos, que consiste en una elevación excesiva de la bóveda de la planta. Al no poder apoyar esta parte, tiene molestias y dificultad para caminar. Respecto a la vida laboral, no puede subirse a andamios ni permanecer en escaleras, ya que este problema le hace tener poco equilibrio.
Su traumatólogo en el Hospital Provincial de Santiago decidió que lo mejor era operarse, por lo que pasó a engrosar las listas de espera del Sergas. De esto hace cuatro años, dos meses y quince días. Y ahí sigue. Durante este tiempo realizó ya dos preoperatorios, uno de ellos en noviembre del 2009 y el otro en julio del 2012. Pero en los dos casos las pruebas han perdido ya su validez sin que Tino se haya operado.
En octubre del 2009 se le ofreció operarse en un hospital concertado, el sanatorio de La Esperanza, algo que rechazó. Ahí, las versiones de Tino y el Sergas difieren. En el primero de los casos asegura que le preguntaron: ¿Quiere usted operarse en el Hospital Provincial o en La Esperanza?. «Eu respostei que prefería no Provincial, xa que é onde me atenderon sempre. Non ía supoñer que iso implicaba agardar catro anos». En el propio escrito de reclamación que remitió a la conselleira, Rocío Mosquera, recuerda que «trasladáronme ao que vostedes chaman unha lista alternativa, pero que eu lle chamo lista de castigo, pois como se entende senón que desde o ano 2009 siga esperando a ser intervido».
En el Sergas constatan el caso y lo cierto es que no niegan ninguna de las informaciones del propio paciente. La respuesta que el servicio de atención al paciente dio a Tino Silva el 31 de octubre del 2012 admite que está en la lista de espera desde junio del 2009; que rechazó ir a un centro privado; que realizó dos preoperatorios en el 2009 y en el 2012, «quedando a espera de programación cirúrxica polo servizo de traumatoloxía».
El centro en el que tiene que ser operado, el Hospital Provincial de Compostela, depende del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), y fuentes de este complejo explican que «el paciente tiene un proceso congénito, pero no incapacitante. Se valoró en el 2009 para una intervención quirúrgica. Se ofreció un centro concertado y lo rechazó. El área integrada de Santiago prioriza por necesidad y gravedad, y no tenemos constancia de que haya variado su situación clínica».
Dificultades para caminar
Lo cierto es que este vecino de Santiago no ha vuelto a tener noticias del Sergas desde finales de octubre del 2012. Con una minusvalía del 34 %, asegura que con la edad cada vez se encuentra con más problemas para caminar.
Incluso enseña documentación aportada por la Consellería de Sanidade en la que se explica que al rechazar la alternativa no se le pueden aplicar los tiempos máximos de demora, «pero os dereitos de antigüidade que se adquiriron en lista de espera do seu centro serán respectados». Y es que a Tino, tras más de cuatro años en una lista de espera, la paciencia empieza a faltarle, pero antigüedad le sobra.
Las normas establecen un máximo de 180 días de espera, pero al rechazar la operación en un centro privado, el usuario pierde este derecho. Mal podía imaginar Tino que esto iba a suponer estar todavía 1.535 días aguardando la llamada de los servicios de traumatología.