El informe sobre las rías gallegas deja dividida a la Eurocámara

Cristina Porteiro
cristina porteiro BRUSELAS / E. LA VOZ

GALICIA

El PP se niega a incluir la visita a la ría de Ferrol en el documento final

20 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La delegación europea responsable de analizar el estado de las rías gallegas está dividida. El jefe de la misión, el popular francés Philippe Boulland, anunció ayer a la Comisión de Peticiones de la Eurocámara que no dispone de un informe definitivo por la falta de consenso con sus homólogas, la liberal austríaca Angelika Werthmann y la ecologista letona Tatjana Zdanoka. Todos ellos visitaron Galicia el pasado mes de febrero y vieron los mismos paisajes y la misma contaminación en sus rías, pero difieren en torno a qué se debe contar y qué se debe omitir en el documento final que deberá ser presentado en quince días.

Los populares se niegan a incluir la visita a la ría de Ferrol en la memoria: «No quise introducir la contaminación de esa ría porque antes del inicio de la misión acordamos no hacerlo», afirmó Boulland. Según sus compañeras encargadas de elaborar el informe, la visita a la planta de gas de Reganosa sí formaba parte de la visita oficial y por tanto los efectos de su ubicación sobre el estado de la ría de Ferrol deben ser recogidos: «Estuvimos allí y el señor Boulland vio lo mismo que nosotras, pero ahora no quiere que hablemos de ello», se quejó Zdanoka. El diputado francés, sin embargo, aseguró que no ha recibido pruebas que puedan vincular los vertidos en el agua con la planta de gasificación.

La polémica no acabó ahí. Los populares volvieron a criticar el informe provisional que se filtró sin el consentimiento de Boulland y en el que se incluyen detalles de la visita a Ferrol: «Es una tomadura de pelo. Que retiren de inmediato el documento. Tiene deficiencias y es desequilibrado», advirtió el popular gallego Millán Mon que exigió un texto «objetivo que recoja las voces de autoridades y peticionarios para animar a las autoridades a seguir trabajando pero sin perjudicar la imagen de Galicia».

La eurodiputada del BNG, Ana Miranda, mostró su malestar por el retraso en el plazo: «Han pasado más de cinco meses y no tenemos nada. Boulland trata de descafeinar el informe para contentar a su grupo, dando la espalda a los peticionarios que llevan denunciando los problemas de las rías desde 1999».

El eurodiputado socialista, Antolín Sánchez Presedo, permaneció al margen de la disputa política, pero instó a sus compañeros de la Eurocámara a «estar a la altura de lo que esperan los ciudadanos gallegos», una demanda a la que se sumó la presidenta de la Comisión de Peticiones, la conservadora italiana Erminia Mazzoni: «Sean maduros y encuentren una solución. La misión a Galicia debería ser un instrumento para detectar problemas y mediar, pero me doy cuenta de que solo estamos creando malestar y confundiendo a los ciudadanos».

La conselleira de Facenda, Elena Muñoz, acudió ayer al Parlamento Europeo de Bruselas para reivindicar el papel de Galicia como gestor de los fondos europeos destinados a ejecutar programas comunitarios claves: «Las regiones son los órganos que mejor conocen las necesidades y puntos estratégicos en los que se deben centrar los esfuerzos para salir de la crisis y lograr un crecimiento sostenible», declaró durante su intervención en una audiencia sobre la contribución del presupuesto de la UE a la inversión pública.

Para lograr un uso eficaz de los fondos, Muñoz propuso hacer esfuerzos en su gestión: «Debemos gastar mejor y conseguir multiplicar los efectos de la inversión».