CC.OO. acusa a Renfe de ocultar la supresión de 104 servicios semanales de tren

s. lorenzo SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

El sindicato cifra el recorte en 1.176 paradas

14 jun 2013 . Actualizado a las 10:38 h.

Desde el día 2, solo hay un tren al día para viajar de Neda a A Coruña o a Ferrol. Pero el que lo use deberá optar por otro medio de transporte si quiere regresar en la misma jornada, ya que no tiene tren de vuelta a Neda hasta el día siguiente. Esta situación se repite en decenas de localidades gallegas afectadas por las últimas restricciones en los servicios ferroviarios de media distancia, que tendrán en Galicia un impacto mucho mayor del que anunciaron Fomento y Renfe.

La supresión de 14 frecuencias semanales entre Ourense y Puebla de Sanabria, prevista para el día 23, elevará el recorte de circulaciones en esta comunidad a 104 a la semana. Pero no solo habrá menos trenes en servicio, sino que los que transiten por ella se detendrán en menos apeaderos, lo que se traducirá en 1.176 paradas menos a la semana. Un total de 20 estaciones echarán la persiana, que se suman a las 26 que ya lo hicieron en los últimos años, y en 24 solo tendrán una parada al día.

El sindicato CC.?OO. actualizó ayer estos datos y acusó tanto al ministerio como al operador ferroviario de trasladar una «información enganosa» para tratar de atenuar el alcance de unos recortes que cifran en 36 frecuencias semanales, frente a las 104 que denuncia la central. El coordinador del sector ferroviario de CC.?OO., Severino Rodríguez, reclamó una «aposta decidida» por el tren como servicio público. Valoró como positiva la inclusión del servicio matinal a Madrid, que mejora la competitividad del ferrocarril y favorece la intermodalidad, pero incidió en que Renfe «bota a xente do tren» con el modelo de gestión de media distancia que aplica en Galicia.

En este punto, la central puso sobre la mesa la clave del debate al señalar que es necesario adaptar la oferta de trenes y frecuencias a las necesidades de los usuarios, con horarios que incentiven el uso del tren. Lo contrario, advirtió Rodríguez, es favorecer una pérdida de clientes, lo que servirá para que Fomento «teña unha escusa para seguir reducindo estes servizos no futuro».