Un canal francés dice que el del 2013 será frío y lluvioso; la Aemet cree que será normal
28 may 2013 . Actualizado a las 11:47 h.El agorero pronóstico del canal francés Météo -hay un 70 % de posibilidades de que este verano en el oeste de Europa, incluida Galicia, sea frío (entre 1 y 3 grados menos de media) y bastante húmedo- hay que tomarlo con precaución. Es una predicción estacional «y, la experiencia así nos lo dice, en estas latitudes, con un clima más variable, la fiabilidad es baja». «Bueno, es baja en todo el planeta excepto en las zonas monzónicas, con estructuras más repetitivas y condicionadas por la estación del año», afirma Ana Lage, del departamento de predicción operativa de MeteoGalicia.
Así que la previsión hecha por los franceses para el trimestre estival «es solo una posibilidad, un escenario». Lage recuerda que en este tipo de pronósticos influyen las condiciones en las que se iniciaron los cálculos de los modelos: «Se hizo con las de principios de mayo y esos días las temperaturas fueron bajas para la época». Que se refieren a tres meses: «Puede ser que en los tres la temperatura quede por debajo, o solo en dos, o en uno, y otro es normal y el tercero cálido». Y que son tendencias generales y a gran escala: «No distinguen las distintas áreas de Galicia, ni siquiera a Galicia como tal».
De hecho, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) maneja un pronóstico distinto. «No presenta tendencias significativas en junio, julio y agosto, ni en temperaturas ni en precipitaciones», avanza el delegado de la agencia en la comunidad, Francisco Infante. «Al contrario de lo que dice el canal francés, aquí no se ve ni un verano más fresco ni tampoco más caluroso», añade. Su comportamiento, según los modelos que maneja la Aemet, será normal. «Pero hay que tener en cuenta -matiza Infante- que se trata de promedios trimestrales, es decir, pueden venir 15 o 20 días malísimos y el resto buenísimos».
Estadísticas
Así que lo de que el 2013 será un año sin verano (o el peor desde 1816, como señalaron en Francia) no deja de ser meteorología ficción. Es más, según las estadísticas climatológicas, los estíos del 2007 y del 2009 en Galicia, por mencionar algunos recientes, tampoco fueron secos ni muy soleados. El de hace seis años registró un grado menos de lo normal (la temperatura media del verano en Galicia es de 18,6 grados) y un 33 % más de lluvia (169 litros cuando la media es 127). En el verano de hace cuatro años la temperatura se mantuvo en el promedio, pero en cambio cayó casi un 60 % más de agua (202 litros).
Y si se analiza la serie desde el año 1961, se concluye que en Galicia hay casi la misma probabilidad de que el verano venga bueno que malo. Registraron una temperatura superior a la media 26, y 25 quedaron por debajo (2006, 1989, 2005 y 2003 fueron los más cálidos, y los más fríos los de 1977 y 1973). En cuanto a la lluvia, hubo 23 veranos más húmedos de la media (destacan los de 1971 y 1977) y 28 más secos (liderados por los de 1962, 1967 y 1981). «Un factor que haría que tuviésemos un mal verano sería seguir con la configuración actual, con el anticiclón retirado al oeste de las Azores, que nos trae vientos de componente norte y aire frío, y una borrasca en Centroeuropa, que dejaría temperaturas altas en Rusia y arrastraría más frío aquí», apunta Ana Lage. «Pero ese es solo un posible escenario».