La conflictividad salta a primaria

maría cedrón REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

José Manuel Casal

Aunque el 82 % de los expedientes disciplinarios se concentran en secundaria, los docentes muestran mayor preocupación por los 26 abiertos a menores de entre 6 y 12 años

29 abr 2013 . Actualizado a las 19:38 h.

Justo unos días antes de que saltara a la luz la semana pasada el caso del menor de Vigo que no acude a clase desde hace un mes por ser víctima de un supuesto acoso, cuatro menores de Nigrán fueron imputados por insultar de forma reiterada a una compañera. Ambos casos -unidos a la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia que condena a la Diputación de A Coruña a indemnizar a la familia de una menor acosada en uno de sus centros- han hecho saltar de nuevo las alarmas sobre uno de los desencadenantes de la conflictividad en las aulas: el acoso escolar. Los expertos aseguran que educar a los profesores sobre cómo actuar ante estos casos, además de realizar una labor de prevención y mediación, es fundamental para que la resolución de los conflictos no salga de clase. De hecho, según fuentes judiciales, no son muchos los casos que acaban en manos de la Fiscalía.

A falta de conocer cuántos de los expedientes disciplinarios abiertos por Educación el curso pasado se deben a asuntos de ese tipo porque la consellería no ofrece datos desglosados, el número de informes cursados muestra que aunque la mayor conflictividad tiene lugar en secundaria (un 82 % de ellos), la apertura de expedientes en primaria -a menores de entre 6 y 12 años- es algo que preocupa al profesorado. De hecho, de los 757 informes abiertos el pasado curso, 26 lo fueron a menores comprendidos en esas edades. Con todo, Galicia no es la comunidad en la que hay mayor conflictividad.

En el caso concreto del acoso, por ejemplo, colectivos como la Asociación contra el Acoso Escolar hablan de que en general entre un 4 y un 6 % de la población escolar de primaria sufre estos problemas, un porcentaje que puede elevarse al 8 % en secundaria, un índice que el catedrático de orientación escolar, Plácido Blanco Bembibre, rebaja al 5 %. Lo que ocurre es que la mayor parte de estos conflictos acaban resolviéndose en el aula. «El acoso escolar no es el asunto más común entre los menores que nos llegan», explican fuentes de la Fiscalía.

Desarrollar labores de prevención en el aula que impliquen a los propios alumnos es fundamental para que estos remitan. Desde la dirección del instituto Maximino Romero de Lema, de Baio, uno de los que ha puesto en marcha un equipo de mediadores este año, son claros: «Non hai que agardar a que un conflito apareza. Aquí non temos conflitividade. Niso, o noso é un centro modelo, pero puxemos en marcha un programa de mediadores para previr e fomentar a integración».