El 65 % de los gallegos nacen en solo el 10 % del territorio

j. c. redacción / la voz

GALICIA

El desequilibrio está desertizando comarcas enteras

17 mar 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Más allá de las difíciles perspectivas que para Galicia plantea su imparable caída demográfica, la territorialidad de los nacimientos acentúa la desertificación poblacional de comarcas enteras, singularmente en el interior del país. De acuerdo con las datos del último año con estadística completa (el 2011), el 65 % de todos los nacimientos acaecidos en Galicia tuvieron lugar en solo el 10 % del territorio. Es decir, de los 21.594 bebés nacidos, 14.104 estaban censados en 31 de los 315 municipios de Galicia; agrupados en una superficie de 3.205 kilómetros cuadrados sobre los más de 29.000 del total gallego.

La desproporción es mucho más acusada entre los diez municipios que alcanzan las mayores tasas de natalidad (las siete ciudades más Narón, Ames y Arteixo) y que asumen por sí solos el 39,5 % del total de los bebés nacidos en Galicia. Para llegar al 50 % de todos los niños nacidos en Galicia no hay que salir de 14 ayuntamientos. Por el lado contrario, se encuentran decenas de concellos que no superan los cinco nacimientos en el año. En total, a lo largo del 2011 fueron 82 y en 28 de ellos solo hubo un nacimiento o ninguno.

Territorios arrasados

A nivel comarcal, la Terra de Caldelas y A Fonsagrada son las que peores indicadores tienen: siete y once partos en un total de siete ayuntamientos y una extensión territorial muy notable. De hecho, A Fonsagrada es con diferencia el concello más extenso de Galicia. La mancha de la despoblación, aunque no es uniforme, se extiende desde las zonas de montaña hasta los valles interiores. En estas comarcas más afectadas, las cabeceras ya no compensan su pérdida de población con los vecinos que captaban de los concellos limítrofes, atraídos por la concentración de servicios y el envejecimiento se acentúa a mayor velocidad. El fenómeno completa el círculo vicioso con la reducción de servicios a causa de la acusada disminución de usuarios. Solo los entornos de las ciudades y el arco atlántico capean a duras penas el vendaval demográfico.

La curva de nacimientos en Galicia ha seguido una evolución similar a la decadencia económica que vive el país. De los 19.327 registrados en 2002, el total fue creciendo hasta los 23.175 que nacieron en el 2008, cuando se alcanzó el techo de la última década. Los últimos años han experimentado descensos continuados, hasta los 21.594 del 2011. Los datos del primer semestre del 2012 apuntan hacia una nueva recuperación, pero deberán ser refrendados con el cierre anual.