La investigación abierta para conocer el calado de esta red que tramitaba licencias de caza a cambio de dinero la destapó la Xunta. El Gobierno autónomo tuvo constancia de los hechos el 11 de septiembre cuando un funcionario, expedientado desde ese día, fue sorprendido en el ordenador de un compañero. Al parecer, se trata de un trabajador de la oficina coruñesa de la Dirección Xeral da Conservación da Natureza, departamento que ahora pertenece a la Consellería de Medio Ambiente, pero hasta hace poco era competencia de Medio Rural.
El funcionario, que sigue perteneciendo a Medio Rural, utilizó el equipo informático de un compañero de Medio Ambiente por la tarde, lo que hizo levantar sospechas entre los responsables de la consellería que encabeza Agustín Hernández.
Tras poner en conocimiento del Ministerio Fiscal los hechos, agentes del Seprona se personaron el 24 de septiembre en las oficinas de Conservación da Natureza de A Coruña para solicitar toda la documentación necesaria para iniciar las diligencias. Un portavoz de la Xunta recordó que «la investigación se está realizando a instancias del Gobierno de Feijoo y esperamos que se adopten todas las medidas oportunas».