Revientan la reunión del claustro de la Universidade de Santiago

Tamara Montero
Tamara Montero SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

XOÁN A. SOLER

El rector condenó el «atropello» ejercido por «grupos pouco representativos»

20 dic 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Tres manifestaciones de otros tres colectivos de la Universidade de Santiago antes de las 10 de la mañana no hacían presagiar nada bueno en la reunión del claustro de la institución para debatir los presupuestos del 2013 y la programación plurianual para el próximo bienio. Pero las cosas fueron mucho más graves de lo que se preveía.

El rector, Juan Casares Long, se vio obligado a suspender la sesión después de que estudiantes y personal de administración y servicios (PAS) irrumpiesen al inicio de la sesión al grito de «¡Dimisión!» tras, según dicen, no llegar a un acuerdo con el rector para que sus portavoces intervinieran durante la sesión. Un grupo de docentes se incorporó después a la protesta.

La sonora protesta no cayó bien en todos los grupos que conforman el claustro, especialmente en los que representan al cuerpo docente, que condenaron la actuación. El rector calificó de «atropello» los momentos vividos, una situación que lo dejó «sorprendido» sobre todo por encontrarse frente a frente con estudiantes con los que había mantenido un encuentro el día anterior, cuando protagonizaron un encierro en el Rectorado.

Entonces, le habían explicado sus reivindicaciones, derivadas tanto de las crítica a la pérdida de la autonomía universitaria como «á falta de democracia» para los estudiantes, que se ven poco representados en los órganos de gobierno de la USC. El rector, una vez calmados los ánimos, fue enérgico en su condena a lo que había ocurrido y afirmó con contundencia que habían sido «grupos pouco representativos da comunidade universitaria» los que habían hecho «un fraco favor» a la universidad pública y a su sistema de gobernanza, y dejó muy claro que los únicos legítimos representantes en la USC eran los claustrales reunidos para el debate.

Tensión creciente

Antes del inicio de la sesión, en los pasillos de la facultad, la tensión iba en aumento. Los PAS mostraron su descontento por cómo se están aplicando las medidas del decreto de racionalización del gasto y por cómo se han aplicado los recortes al personal.

Isabel Vaquero, una de las representantes de los trabajadores de la USC, aclaró que la institución «pretende aplicar os recortes no nivel máis grande cando ten capacidade de aplicalos doutra maneira», y que el período de negoción que se abrió entre la Xerencia y los trabajadores en septiembre no ha sido más que un «paripé», con solo dos encuentros, uno de ellos, el de la comisión técnica, sin capacidad de decisión. También un grupo de profesores estaba a las puertas del claustro a las 9.30 horas. Su protesta, bajo el lema «Anulados indignados» iba contra la anulación parcial de un concurso de plazas docentes porque la Xunta no autorizó la salida de las plazas este año.