Prudencia y caras largas en la plaza mayor de Europa

Nacho Mirás SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Paco Rodríguez

05 dic 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

El Hostal de los Reyes Católicos no es un parador más. Es un emblema con vistas a la plaza mayor de Europa. Y que, además, funciona. «La crisis la notamos como todos, pero en temporada alta el establecimiento está lleno», dice uno de los trabajadores. Ayer tocaba día de caras largas. La palabra más repetida entre la plantilla es «prudencia». «Confiamos en que el anuncio de diecinueve despidos sea un órdago de la empresa, y que, finalmente, no se llegue a tanto».

La preocupación se palpaba ayer entre los trabajadores, no así entre los huéspedes, «la mayoría en esta época extranjeros», explicaban.

El Hostal de los Reyes Católicos es, junto con el Hostal de San Marcos, en León, uno de los dos únicos paradores que cuentan con convenio propio. Por eso los empleados, que ayer por la tarde celebraron una asamblea para estudiar las malas noticias, confían en que se respete. «De momento -precisan- nadie nos ha comunicado nada de manera oficial. Es pronto para pronunciarnos. Se verá».