Pachi Vázquez elude valorar el libro en el que Touriño carga contra él

s. l. santiago / la voz

GALICIA

«Un dos maiores erros foi meter a Vázquez no Goberno», asegura el expresidente socialista

17 nov 2012 . Actualizado a las 11:01 h.

El acto de constitución del nuevo Parlamento tuvo, además de Beiras, un segundo protagonista fuera del hemiciclo: Emilio Pérez Touriño. Ni siquiera fue necesaria su presencia en el antiguo cuartel de O Hórreo. Bastó la difusión de la radiografía crítica que el expresidente de la Xunta traza en su libro de memorias de los que fueron sus colaboradores políticos en el PSdeG y en el bipartito, para que las opiniones al respecto de los actuales dirigentes socialistas se convirtieran ayer en las piezas más codiciadas por los periodistas en el exterior del salón de plenos. Pero el principal receptor de los dardos de Touriño, Pachi Vázquez, esquivó cámaras y micrófonos para remitirse a las declaraciones de Abel Losada.

El portavoz de los socialistas tiró de ironía, a propósito de unas memorias en las que Touriño describe a Vázquez como «un dos meus erros». Losada aseveró que no ha leído el libro en cuestión. Manifestó a los periodistas que sus lecturas están ocupadas ahora en una obra del nobel estadounidense Joseph Stiglitz, «un libro moi interesante sobre a economía da desigualdade».

De puertas adentro, en la actual dirección socialista más de uno interpreta las memorias políticas del antiguo líder del PSdeG como un ejercicio de terapia personal.

Jorquera pide autocrítica

El ruido mediático generado por el avance de las memorias de Touriño salpicó incluso al BNG. Interpelado al respecto, su portavoz parlamentario, Francisco Jorquera, señaló que solo conoce del volumen los extractos publicados en la prensa, aunque resolvió que «cando unha persoa afirma que todos excepto el cometeron erros, debería exercer un pouquiño a autocrítica». En su libro, el expresidente defiende sobre el Gobierno de coalición con el BNG que echó en falta un pacto de «salvagarda da unidade de acción». Acusa al que fue vicepresidente en el bipartito, y entonces líder del Bloque, de utilizar el Ejecutivo «para crear unha rede de apoios con tinguiduras populistas e clientelares».