El hijo de la imputada por el crimen de A Cañiza vio cómo su madre mataba al vecino de una pedrada

José Luis González Martínez, el hombre muerto de una pedrada, fue enterrado ayer por la tarde en la parroquia de Luneda. La investigación se centra ahora en aclarar cuál de las versiones sobre el crimen es la real, ya que la imputada, Sandra Estévez Nogueira, de 32 años, ha cambiado su confesión inicial ante vecinos y la Guardia Civil por otra en el juzgado. En ella inculpa a su pareja, Samuel González Menéndez, aunque ella desconocía aún que él se había ahorcado. Será enterrado hoy por la tarde en Luneda. Ella continúa internada en una unidad psiquiátrica de O Meixoeiro. Seguía tratamiento médico.

Además de ella, el único testigo es su hijo de 8 años. Una vecina confirmó que «nadie vio» el crimen. Cuando los vecinos bajaron a la calle hallaron a la pareja junto a José Luis tirado en el suelo. «Ya había pasado todo y llamaban a la Guardia Civil. Mi familiar avisó a la ambulancia. Bajé por las escaleras y metí al niño en mi casa», relató ayer.

Según la hermana de Sandra, el menor «vio cómo ella lo mató». Está con unos primos y quedará a cargo de su abuela de Abelenda, en Arbo, salvo que la Xunta lo tutele. Sandra carece de carné, lo que sitúa a Samuel como conductor del coche.

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