La A-6 sigue cerrada por el vuelco de un camión de gas en As Nogais

benigno lázare LUGO / LA VOZ

GALICIA

Pradero

La autovía sigue cortada y esta mañana se ha iniciado el trasvase de la carga de gas licuado

24 abr 2012 . Actualizado a las 12:11 h.

Un camión cargado con 23.000 kilos de gas licuado que circulaba por la autovía A-6 en dirección a Madrid se salió ayer de la calzada a la altura de Doncos, en el municipio lucense de As Nogais, y tras cruzar la mediana quedó volcado cortando los carriles en dirección a A Coruña. El conductor, S.P.P., de 32 años, resultó herido y fue trasladado en una ambulancia del 061 al Hospital Lucus Augusti, pero su estado no reviste gravedad.

La autovía sigue de momento cortada. Esta mañana ha comenzado el trasvase de la carga de 23.000 litros de gas licuado que transportaba el vehículo a otro camión que ha llegado esta madrugada desde Lleida.

Tras producirse el siniestro, a las diez y media de la mañana de ayer, la autovía fue cortada al tráfico totalmente debido a la peligrosidad de la carga, agravada por una pequeña fuga en un serpentín de una válvula de seguridad. Paralelamente, la Guardia Civil de Tráfico desalojó a los habitantes de las viviendas más próximas al lugar, en la parte baja del pueblo, y mantuvo un dispositivo para impedir el acceso a la zona y desviar el tráfico por la N-VI, en un tramo de más de diez kilómetros entre el enlace de Doncos y el de Becerreá.

El accidente se produjo en el kilómetro 441 a la salida de un túnel en la ascensión al puerto de Pedrafita. En la hierba de la mediana quedaron, como una fotografía, las marcas de las ruedas del vehículo, que reventó las barreras quitamiedos, volcó sobre el lateral izquierdo, probablemente en la cuneta central, giró más de 90 grados y se detuvo a cien metros cruzando totalmente los carriles en sentido contrario.

El accidente pudo haber provocado una catástrofe porque al salirse de la calzada en sentido Madrid pas junto a una alcantarilla que, de haber chocado contra ella, podría haberse roto la cisterna y tenido consecuencias mayores, si bien no es fácil que explote, de acuerdo con los expertos. Pese a ello, se tomaron precauciones ante una posible onda explosiva, según señalaron personas que trabajaban ayer por la mañana en el control de la situación. También se dio la circunstancia de que en ese momento no circulaba ningún vehículo en sentido contrario, porque la colisión, aparte del posible daño para los ocupantes de ambos, podría igualmente generar más graves consecuencias.

Desvío del tráfico

Los agentes de cuatro patrullas de la Guardia Civil de Tráfico establecieron de inmediato un dispositivo para desviar el tráfico y controlar la zona. Al lugar también acudieron los bomberos del parque de Sarria con dos camiones y un vehículo ligero, que se situaron a unos cien metros del camión siniestrado, montando guardia durante toda la jornada. Provistos de botellas, a lo largo del día realizaron varias inspecciones comprobando que la presión y la temperatura de la cisterna se mantenían constantes.

El camión, articulado, procedía de la planta de Reganosa, en Ferrol, y se dirigía al lugar de Páramo, en León. La Guardia Civil desconocía las causas que pudieron motivar el accidente, ocurrido con el vehículo cargado y en una subida, porque durante todo el día no pudo acceder al tacógrafo ni realizar ninguna inspección en el lugar.

Pasadas las cinco de la tarde fue anunciada la llegada de un técnico de la empresa en el plazo de una hora, y solicitada la presencia de dos grúas. El experto llegó alrededor de las siete y decidió actuar liberando primero el gas, antes de trasvasar el líquido y retirar el vehículo, trabajos que no estaba previsto que finalizasen hasta la madrugada o incluso esta mañana.

A media tarde también pudieron regresar a sus casas los vecinos de Doncos que habían sido desalojados, salvo los de la vivienda más próxima. Este trabajo había sido realizado con la colaboración del alcalde de As Nogais y los servicios municipales.