Muere un sacerdote en un colegio de Foz al caer de una escalera cuando reparaba una canasta

María Cuadrado Fernández
maría cuadrado VIVEIRO / LA VOZ

GALICIA

El religioso tenía 77 años y los profesionales médicos no lograron reanimarlo

14 abr 2012 . Actualizado a las 06:00 h.

La muerte del religioso José Castro Antolín, de 77 años, causó ayer una gran consternación entre los miembros de la comunidad educativa del colegio concertado Martínez Otero, de Foz. Castro Antolín, miembro de la congregación de salesianos que gestiona el centro, sufrió un accidente al caer desde una escalera cuando intentaba hacer una reparación en una de las canastas del pabellón polideportivo. Fue un particular el que a las 12.33 horas avisó al 112 para requerir la presencia de un ambulancia en la calle Paco Maañón, en pleno centro del casco urbano. Además de la ambulancia medicalizada, hasta el lugar también se desplazaron miembros de la Guardia Civil y la Policía Local.

Los intentos de los profesionales médicos por salvar la vida del sacerdote fueron en vano. Varias fuentes oficiales confirmaron que el hombre recibió un fuerte impacto en la cabeza, pero será la autopsia la que determine la causa exacta de la muerte. El religioso falleció en el lugar del accidente, y poco después de las dos y media de la tarde trascendía la noticia del fatal desenlace. El alcalde focense, Javier Jorge Castiñeira, se desplazó hasta el lugar de los hechos. Lamentó lo sucedido y recordó con cariño al religioso.

Una persona muy querida

La noticia del accidente mortal se extendió rápidamente por el centro. El fallecido, natural de un pueblo de Palencia, era una persona muy querida en un colegio que el próximo curso y, después de veinte años, dejará de ser regentado por los salesianos.

El director del centro, José Luis Luena, lamentó lo sucedido y recordó que el religioso llegó al colegio en el año 2004. Era conocido por muchos como «el padre manitas», porque se preocupaba de hacer cualquier arreglo en las instalaciones escolares y solicitaba regularmente la colaboración municipal para atender cualquier mejora necesaria en el centro educativo. Así lo recordaron ayer el regidor y también el exalcalde García Rivera.

Funeral y entierro

A última hora de la tarde de ayer se esperaba en Foz la llegada del cuerpo del religioso, que fue trasladado sobre las cuatro de la tarde a Lugo para que se le practicara la autopsia. Será enterrado hoy en el panteón que la congregación religiosa tiene en el cementerio de San Froilán, en la capital lucense. Antes, a las 15.30 horas, está previsto que se oficie el funeral en la iglesia parroquial de Foz. Desde la empresa funeraria informaron de que habrá servicio de autobús desde la localidad mariñana a la ciudad amurallada.

La delegada territorial de la Xunta de Galicia, Raquel Arias, visitó ayer por la tarde el colegio Martínez Otero para transmitirles su pésame a los religiosos y a la comunidad escolar. También les trasladó el pésame del conselleiro de Educación y Cultura, que mantuvo ayer una conversación telefónica con el director del colegio.