Aparece entre la maleza en Verín una talla robada de una iglesia de Vilardevós

Marta Vázquez Fernández
marta vázquez OURENSE / LA VOZ

GALICIA

Al parecer el ladrón quiso desahacerse de la pieza que, según se sospecha, tiene escaso valor artístico

21 mar 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Los agentes de la Guardia Civil de Verín localizaron en la tarde del pasado lunes, oculta entre la maleza, una talla de San Pedro que había sido robada en diciembre pasado de la iglesia parroquial de Santa María de Soutochao, en la localidad ourensana de Vilardevós. Un vecino avisó a los investigadores del hallazgo, en un monte próximo a la localidad de Cabreiroá, de la talla religiosa que, según se sospecha, tiene escaso valor artístico. Quizás por eso el ladrón, que aún no ha sido detenido, quiso deshacerse de ella y decidió abandonarla en el monte.

Y es que según confirmaron ayer fuentes del Obispado de Ourense, ellos mismos se sorprendieron al saber, el pasado 30 de diciembre, del robo de la imagen, una escultura de san Pedro de pie de 70 centímetros de alto, realizada en madera policromada y de unos 60 años de antigüedad. Se trataba de una talla que se adquirió hace más de 30 años, tras el robo de otra del mismo santo que sí tenía mucho valor artístico y que databa del siglo XVI.

«Cuando supimos de aquel robo nos extrañamos», aseguró ayer Miguel Ángel González, delegado diocesano de patrimonio, quien matizó que junto al san Pedro que se llevaron de la capilla, había otras tallas con mayor valor artístico que, sin embargo, no despertaron el interés de los delincuentes. Esta circunstancia denotaría, en todo caso, la falta de conocimiento en materia de arte religioso de las personas que asaltaron la iglesia.

De hecho, y aunque las investigaciones se encuentran abiertas a la espera de que se efectúen arrestos relacionados con este asunto, no se descarta que durante los dos meses y medio transcurridos desde el asalto, los delincuentes hayan tratado de vender la imagen en anticuarios o a coleccionistas particulares. Estos, al comprobar el nulo valor de la talla, habrían rehusado comprarla, por lo que sus poseedores habrían optado por deshacerse de ella.

No presentaba daños

Los agentes de la Guardia Civil sospechan que la talla no llevaba mucho tiempo en el lugar en el que fue encontrada, porque no presentaba daños que le hubiese provocado una larga exposición al frío, el sol o la lluvia. Las investigaciones se centran ahora en localizar a la persona que la depositó allí.