Javier Rey Ozores deja la jefatura de la Fiscalía lucense

Xosé Carreira LUGO / LA VOZ

GALICIA

13 mar 2012 . Actualizado a las 06:00 h.

En pleno fragor de una batalla judicial que no tiene precedentes en Lugo, la Fiscalía lucense se queda sin cabeza. Es la segunda vez que se produce una situación semejante en los últimos cinco años. El fiscal jefe, Javier Rey Ozores, ha pedido su traslado a A Coruña.

Ozores se desplazó el pasado jueves a Madrid a la Fiscalía General del Estado para informar de su deseo de no continuar al frente de la representación del ministerio público en la provincia lucense. El propio Ozores confirmó ayer esta situación. Las causas que al parecer alega el todavía fiscal jefe de Lugo son estrictamente personales. Su familia reside en A Coruña y él prefiere quedarse ocupando en esa ciudad una plaza de fiscal.

Diversas fuentes explicaron ayer que Javier Rey pasaría a ocupar la plaza de segunda categoría que dejó vacante en la capital herculina Carlos Mariscal de Gante, que venía desempeñando como fiscal coordinador menores de la Audiencia Provincial de A Coruña. El Boletín Oficial del Estado del pasado sábado publicó su nombramiento como fiscal del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia. Ozores cubrirá su puesto por escalafón y antigüedad, pero no quiere decir que vaya a ser el responsable del departamento de menores. El fiscal jefe lucense permanecerá en su puesto alrededor de un mes más hasta que se haga efectivo el traslado a A Coruña. A posteriori se establecerán los plazos correspondientes para cubrir la plaza.

Javier Rey Ozores cumpliría el próximo mes de junio tres años al frente de su cargo en Lugo. Llegó a la capital lucense para cubrir el puesto que dejó de forma anticipada Jacinto Fernández Villalvilla, que, cuando llevaba medio mandato cumplido, pidió marcharse a Ponferrada, de donde provenía.

La Fiscalía tiene en los próximos meses un papel clave en todos los grandes procesos judiciales abiertos en la capital lucense. Además de tomar decisiones que pueden ser clave en la operación Campeón (hay varios políticos implicados), tiene que afrontar las calificaciones correspondientes a la Carioca, la investigación que puso al descubierto una presunta trama entre proxenetas y algunos miembros de cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. También tiene que acusar en el caso de la retirada de multas de la DGT y de la Policía Local, y en la referida a la explotación de decenas de magrebíes. Asimismo siguen abiertas las operaciones Rei y Muralla, por corruptelas en obras provinciales.