La conselleira de Medio Rural augura un año «complicado» con los incendios

Alfredo López Penide
López Penide PONTEVEDRA / LA VOZ

FIRMAS

19 feb 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Desde hace unos días, Medio Rural mantiene activado su dispositivo aéreo contraincendios. De este modo, ya están operativos en toda Galicia siete helicópteros y cuatro aviones, unos medios que se incrementarán a partir del 1 de marzo con un avión y el helicóptero «máis grande» del Estado.

Así lo puso ayer de manifiesto Rosa Quintana, conselleira de Medio Rural. Durante una visita a la base pontevedresa de O Campiño, asumió que lo que queda de año será complicado desde la perspectiva de los fuegos forestales: «Xa non é que este ano sexa complicado, é que vimos dun ano pasado moi complicado. Estamos necesitando auga, pero xa non só polo tema dos incendios, senón polos pastizais ou polo mar, que necesitan auga doce. A ver se a meteoroloxía axuda un pouco».

A lo largo de los próximos meses, la intención de la Administración autonómica es incidir en aquellas zonas que se consideran que pueden conllevar un mayor riesgo de incendio. En este punto, Rosa Quintana reseñó que, «ano tras ano, hai parroquias onde a intensidade incendiaria é moi forte, e nesas imos traballar en especial».

La titular de Medio Rural lamentó que pese a que se cuenta con grandes profesionales y a que se destinan 30 millones de euros anuales a la lucha contra las llamas, Galicia sigue «soando como esa comunidade autónoma onde os lumes asesinan os nosos montes». Es por ello que defendió la necesidad de que toda la sociedad denoste y persiga a los incendiarios, así como destacó la importancia de fomentar el respeto al medio ambiente entre los más pequeños desde los centros educativos.

Detenido en Agolada

Fuentes de la Consellería de Presidencia comunicaron también ayer la detención de un vecino de Agolada como presunto autor de un incendio forestal que tuvo lugar en ese municipio pontevedrés el pasado día 4. Según declaró el sospechoso a la Policía Autonómica, su intención era quemar un matorral en una finca de su propiedad, pero los siete focos que prendió, sin la pertinente autorización para ello, quemaron una superficie de alrededor de diez mil metros cuadrados de monte raso.