La DGT estudia instalar otro en el túnel pontevedrés de Folgoso, en la A-52
GALICIA
El nuevo radar de tramo gallego se estrena con pocas infracciones
10 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.49,24 segundos. Eso es lo que se tarda en atravesar el túnel de O Sartego a 90 kilómetros por hora. Cumplir con ese breve recorrido en menos tiempo puede acarrear, desde ayer, una multa. Pocos conductores estrenaron en negativo este nuevo radar de tramo que toma con exactitud la matrícula del vehículo, la hora en la que entra y a la que sale; instantáneamente halla la media y, si es menester, sanciona al conductor.
Pero ayer, la circulación por este túnel próximo a Ferrol, en plena AP-9, fue más prudente que nunca y el efecto intimidatorio del nuevo radar alcanzó al resto de los túneles que se encuentran en la zona. A las ocho de la tarde habían sido multados menos de diez conductores.
La amplia difusión del inicio de la actividad sancionadora en el túnel contribuyó a que la mayor parte de los automovilistas pisaran el freno antes de entrar en ese tramo y que los adelantamientos fueran muy escasos en su interior. Durante el último mes, en el que Tráfico puso en marcha el dispositivo aunque sin multar a los infractores, el 0,5 % de los vehículos infringieron los límites hasta ser merecedores de sanción: la mayor parte de ellos circulaban a una velocidad de entre 110 y 130 kilómetros por hora. Unos 25 vehículos fueron controlados a una velocidad todavía mayor. Todos estos conductores, aunque no fueron sancionados, sí recibieron una carta de la DGT en la que eran informados de la incidencia.
La DGT estudia instalar un nuevo radar de tramo en Galicia, que estaría ubicado en la provincia de Pontevedra. La ubicación que se está manejando es el túnel de Folgoso, en la A-52, situado en el concello de A Cañiza.
Pocas quejas
Entre los usuarios, más de diez mil al día según los datos de Tráfico, ayer apenas se oían quejas, aunque sí algunos comentarios sobre las precauciones extras que muchos tomaban durante su travesía por el túnel. La mayor parte coincidían en subrayar la moderación habitual con la que se atraviesan los túneles de la AP-9 entre Pontedeume y Ferrol, de manera que la tónica del día no difería, en su opinión, demasiado de la de cualquier otra jornada.
El radar de tramo está ubicado solo en sentido Ferrol, de manera que los vehículos que entran en el túnel lo hacen afrontando un descenso. Si el conductor no está pendiente, la propia inercia puede llevar a un aumento de la velocidad a lo largo del tramo, modificando así su velocidad media y haciéndolo más vulnerable a una hipotética sanción.
En función de la gravedad de de la infracción, las multas pueden ir desde los 100 a los 600 euros, con una pérdida de entre dos y seis puntos del carné de conducir. La incorporación de este nuevo sistema, que no detecta la velocidad en un punto sino que saca una media, busca aumentar la seguridad, según la DGT en tramos especialmente sensibles por su alta densidad de tráfico o por la peligrosidad inherente a espacios como túneles o viaductos.