Cíes bota el primer palangrero que opera en fondo y superficie

La Voz LA VOZ | VIGO

GALICIA

GUSTAVO RIVAS

El ministro de Pesca de Brasil se interesa por los diseños de buques construidos en Galicia El astillero se especializa en este prototipo por su gran aceptación en el mercado

20 sep 2003 . Actualizado a las 07:00 h.

El astillero vigués M. Cíes botó ayer el Novo Airiños para la empresa del mismo nombre, un barco pesquero de 50 metros de eslora, que está proyectado para realizar acciones de pesca mixta de palangre de superficie y de fondo en los océanos Índico y Pacífico. Esta embarcación se dedicará a la captura y conservación de pez espada, atunes, tiburones y otros pescados afines, como el róbalo de profundidad. Está equipado con los medios más avanzados para realizar las maniobras de pesca y cuenta con un parque de procesado y elaborado de pescado que lo convierte en un buque que aportará valor añadido a sus capturas, conservando el producto en las mejores condiciones hasta su llegada al puerto. El astillero M. Cíes está considerado en la actualidad como uno de los pequeños y medianos astilleros más importantes de la ría de Vigo, por su cartera de pedidos y sus últimas construcciones, entre las que figura el más moderno buque oceanográfico de España, el Vizconde de Eza , construido recientemente para el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Cuenta con dos centros de trabajo con más de 15.000 metros cuadrados en la ría de Vigo, uno en Fragosiño, donde se inicia el proceso de construcción, y otro en Ríos (Teis), donde se concluye la construcción de los buques. Ministro brasileño El ministro de Pesca de Brasil, José Fritsch, asistió a la botadura del palangrero. El responsable de Pesca del Gobierno brasileño encabezó una delegación de empresarios de su país, que estaba muy interesada en este tipo de embarcaciones para renovar su flota pesquera. La expedición brasileña está en Galicia participando en la Feria Mundial de la Pesca, que se desarrolla en Vigo y en la que participan representantes de casi todos los países pesqueros del mundo. Fritsch avanzó un poco más en su propuesta de abrir sus aguas a las empresas mixtas gallego-brasileñas, aunque también explicó que esta será la única forma de colaboración, ya que, de momento, descarta un pacto pesquero con la UE. En este sentido, dijo que el presidente brasileño Lula ha decidido invertir 500 millones de dólares en esta industria (unos 100.000 millones de las antiguas pesetas) y que se materializará en la compra y arrendamiento de 200 buques nuevos y de segunda mano, que podrían ser de procedencia gallega o directamente brasileña. El ministro agregó que su caladero les permitirá el desarrollo de una industria fuerte con el paso de los años, de modo que se cierra prácticamente un pacto pesquero con la UE.