Después de entrenar en la India, acaba de participar en un campus de la LFP en China y el próximo mes irá a Nigeria
17 feb 2017 . Actualizado a las 11:26 h.Óscar Bruzon (Vigo, 1977) se ha convertido en un trotamundos en el mundo del fútbol. En su día fue un pionero en adentrarse en el balompié indio, una senda que más tarde han seguido otros técnicos y jugadores españoles, y ahora está inmerso en una iniciativa de LaLiga para su expansión por el mundo. Como entrenador ha participado en un proyecto piloto en China y el próximo mes de marzo viajará a Nigeria, sin descartar otras latitudes en el futuro.
«LaLiga comenzó con proyectos internacionales desde hace dos años y medio, y está pidiendo gente licenciada, que tenga el título UEFA Pro y que a la vez hable inglés, y yo tengo la suerte de reunir las tres condiciones. La verdad es que me veo en mi salsa», comenta el vigués, que ha tenido China como su principal destino. El gigante asiático es un objetivo estratégico para la patronal del fútbol español, y Bruzon Barreras fue uno de los diez técnicos elegidos como docentes en el Campus Chinese Youth Football Winter Camp, celebrado en la ciudad de Kunming fruto de un acuerdo de colaboración entre el ministerio de educación chino y la LFP.
«Trabajamos durante el día en campo, con los chavales, y por la tarde, a última hora, hacíamos presentación con los entrenadores de la metodología de los equipos de la Liga. Se trata de exportar la tecnología de aquí, entre comillas, a estos países. La idea de LaLiga es explicarle como pasar del método analítico, que las cosas salgan por repetición, a integrar las tareas», comenta, mientras destaca el diferente método de aprendizaje que utilizan: «Ellos tienen muy poca toma de decisión, poco liderazgo, todo muy mecánico. Todavía comienzan a calentar con 10 o 15 minutos trotando alrededor del campo, algo que hacíamos aquí hace 30 años, y eso es lo que estamos intentando corregir o ayudarles».
El curso de diez días de duración pretende ser la primera piedra para el futuro. «El objetivo es ir a acuerdos de mayores dimensiones». Como avanzadilla, ya hay medio centenar de técnicos españoles trabajando en colegios, centros que deben servir de punto de arranque para dotar de músculo a las categorías inferiores y más tarde los clubes. Apoyado en el gran interés chino por el fútbol. «Hay una fiebre de carallo, con muchos niños y mogollón de equipos de chicas entrenando».
El siguiente punto de destino sería Nigeria, una experiencia que iba a comenzar esta semana y que se ha pospuesto hasta marzo por temas burocráticos. «Se trata de un equipo sub-16 nigeriano que viene a jugar un torneo patrocinado por LaLiga y los entrenadores de allí piden técnicos españoles para lo mismo, para entrenar con una parte de campo y otra metodológica y más técnica de explicaciones». La iniciativa tendrá una semana de duración.
Todo forma parte del plan de expansión de la LFP por el mundo, que ha tenido un fuerte impacto en Estados Unidos y que ahora se enfoca al mercado asiático y en el Golfo Pérsico. «La LaLiga se está expandiendo muy bien a nivel internacional. Seguro que van a ir entrando proyectos y el tema es estar disponible», comenta Óscar Bruzon.
Porque el vigués, que está encantado con este trabajo, tampoco cierra la puerta a volver a los banquillos después de su experiencia de segundo técnico en el Mallorca con Vázquez: «Estoy en un momento de reflexión. Estuve muy contento trabajando en el Mallorca. Quiero estar a disposición de Fernando, pero tengo abierto el mercado asiático a la espera de que salga algo, pero también estoy muy contento con los ciclos formativos de la Liga». Frentes no le faltan.