Noemí Vila, operada por tercera vez de una lesión de rodilla, no volverá a jugar
07 ene 2017 . Actualizado a las 16:33 h.La guardameta viguesa Noemí Vila, 22 años, no podrá volver a jugar al fútbol. Es la consecuencia, confirmada ayer tras pasar por quirófano por tercera vez en el último año y medio, de la lesión que sufrió en septiembre del 2015. De la dolencia y, denuncia la joven jugadora -futbolista del Erizana en el momento del incidente-, de la supuesta negligencia cometida por el primer traumatólogo que la intervino.
El primer diagnóstico, reconoce Noemí, fue brutal. «Me dijeron directamente que me había roto todo: los dos meniscos, el ligamento cruzado anterior, el lateral interno, tenía desprendimientos óseos...», recuerda. Con todo, el tiempo de recuperación normal debería haber oscilado entre los seis y los ocho meses. Ella lleva el doble de tiempo y está pendiente del resultado de esta nueva cirugía, en la que le han hecho un injerto de un ligamento del banco de huesos, para saber si podrá hacer vida normal. Llevaba desde septiembre esperando a que la llamaran.
Desde que sufrió la rotura, en un partido frente al Zamora cuya fecha no se le olvidará jamás, tardaron un mes en operarla por primera vez y otro mes en comenzar la rehabilitación, cuando suelen ser diez días. «De ahí vino el primer problema, porque la rodilla me quedó tiesa, no era capaz de recuperar movilidad», relata. Eso llevó a una segunda operación hace ahora un año, el 8 de enero del 2016, que tampoco tuvo el resultado esperado. «Ahí recuperé algo, pero las molestias persistían».
La preocupación de Vila iba en aumento y así se lo hacía saber a su doctor. «A veces ni me exploraba. Me decía que era normal y me citaba para el mes siguiente». Ella, aparte de quejarse, trataba de hacerle entender exactamente cómo se sentía tirando de sus conocimientos, pues estudiaba Fisioterapia. La respuesta siempre era la misma, hasta que un día cambió. «Acabó diciendo que me daba el alta y que nunca volvería a andar con normalidad. Que me buscara un fisio que me hiciera precio porque lo iba a necesitar toda la vida. Para mí fue una impotencia tremenda y un auténtico calvario», lamenta.
Pidió una segunda opinión y por fin encontró una alternativa que se materializó en la intervención a la que fue sometida ayer. «Me dijeron que se podía solucionar con esta nueva operación», comenta. Admite que afrontaba con miedo este nuevo paso por el quirófano. «Muchísimo. Temo que se vuelva a repetir lo mismo y volver a pasarlo así de mal. La recuperación es complicada y no quiero ni pensar en tener que seguir como hasta ahora». La operación fue un éxito. Ahora habrá que esperar.
«Aunque no sea un trabajo, era mi forma de vida»
La lesión de Noemí ha repercutido de manera directa en su día a día hasta el punto de que dejó los estudios por los problemas que le suponía tener que depender de otras personas para desplazarse y, en definitiva, para casi todo. «Fueron seis meses sin poder caminar sin muletas. Y el dolor de subir las escaleras en una casa sin ascensor era tremendo», señala. Incluso pese a la mejora tras la segunda intervención sigue teniendo, por ejemplo, que «bajar las cuestas con dolor y mucho cuidado», porque se le desplaza la rodilla.
Pese a todo, nunca ha perdido las ganas de volver a jugar al fútbol. Pero ayer se desvanecieron todas sus esperanzas. «Quería quitarme la espina aunque fuera jugando un año o dos más. Pero al ver cómo quedó después de la operación, el traumatólogo ya me dijo que no debería volver». Así, ayer Noemí tenía sentimientos encontrados, entre el alivio por que la intervención hubiera salido bien y la decepción por decir adiós al fútbol. ««Aunque no sea un trabajo como para muchos hombres, sí que era una forma de vida para mí. Ahora solo pienso en recuperarme y hacer vida normal cuanto antes, pero me va a faltar una parte importante».
Queda pendiente el proceso legal que ha emprendido contra el primer médico que la atendió. «Contacté con un abogado que estudio el caso y ve que es viable. La semana pasada puse una primera reclamación por el tiempo de espera par esta tercera operación y me llamaron este lunes...».