Federico Moccia: «En el amor nadie podrá poner la última palabra»

ANA MONTES

FUGAS

Luca Piergiovanni

Otro cebo para los lectores que ya le adoran y los rezagados que en «Tres veces tú» encontrarán las historias de sus otras dos novelas. Esta vuelta al pasado y al presente cierra la gran historia de amor que detonó con «A tres metros sobre el cielo».

03 feb 2017 . Actualizado a las 12:55 h.

Cuenta que tardó seis meses en escribir las 800 páginas de Tres veces tú mientras una lectora acabó el libro en una sola noche. Sus lectores tienen ganas de Moccia y de dejarse guiar por ese raudal de sentimientos entre los que los españoles, según el autor, encontramos más recovecos y matices que otros lectores. Por eso nos homenajea sacando aquí la novela en primicia mundial. Tres veces tú nos trae una llave, la de la felicidad, para cerrar la trilogía que se hizo famosa con los candados del amor que abarrotaron el Puente Milvio, en Roma, en A tres metros sobre el cielo. Step, Babi y Gin, ya treintañeros, se despiden, de momento en esta nueva entrega, «depende de cómo reaccionen los lectores», adelanta el guionista y escritor. Aunque siguen con él en su cabeza.

-¿Por qué sale el libro en España antes que en Italia, donde aparecerá en abril?

-Porque España es el país en el que me he sentido más comprendido. Los españoles han entendido por encima de otros lectores lo que yo he intentado transmitir en A tres metros sobre el cielo -el final del primer amor- y en Tengo ganas de ti -el deseo de empezar a amar-. Quizás es por la forma apasionada de los españoles. También mis películas son más fieles a mis libros. Aquí se ha sabido ver que la trilogía no es solo para jóvenes sino para cualquier edad porque habla del dolor y la belleza de una historia de amor, que puede ser la primera o cualquier otra que te despierte algo especial por alguien.

-¿Cómo se dio cuenta?

-Firmando libros a los chavales que venían con los fragmentos subrayados y que les habían parecido más importantes. Por eso he lanzado la promoción en España.

-¿Es el tres su número fetiche?

-El tres me sirve en esta novela para enlazar con la primera y dar continuidad a esta trilogía aunque Tres veces tú puede leerse sin conocer las anteriores porque en el desarrollo de la historia poco a poco se va contando todo. Pero soy bastante supersticioso. Cuando se cae la sal en la mesa, me la tiro por encima del hombro tres veces. Y si se me cruza un gato negro, dejo que pasen tres coches. Pero me gusta tener también rituales positivos. Si voy a tener un día importante, me pongo algo nuevo que inaugure ese día.

-¿Es usted romántico?

-Claro, ser romántico significa saber apreciar las cosas que suceden en la vida, la belleza de algunos momentos y la importancia del gusto por saborear tu felicidad y la posibilidad de hacer feliz a otro.

-¿Qué queda hoy en Italia de esa juventud que vivió?

-Ha cambiado mucho porque entonces no nos mandábamos mensajes continuamente aunque nos escribíamos cartas o postales cuánto nos echábamos de menos. Pero la emoción, el pudor y la belleza que transmite una parejita al darse un beso por la calle pasando de todos a su alrededor hace que todas las generaciones sean idénticas en el tiempo.

-Al crecer sus personajes, ¿tiene la impresión de que la vida se ha pasado deprisa?

-Si, porque el primer libro lo escribí hace 25 años. Pero en este, ha sido como si me hubiera sentado en una mesa donde mis personajes llevaban tiempo comiendo y se mostraran felices de volver a verme. Una sensación preciosa similar a lo que nos sucede al reencontrarnos con un amigo íntimo del pasado, relación que retomas en el mismo punto donde la habíais dejado.

-¿Para escribir a los jóvenes se siente por dentro uno más?

-Me siento yo mismo. Hago cosas de mi edad. No voy a discotecas donde van ellos sino a los locales y fiestas de la gente de mi generación. Pero cuando te pones a escribir es como si te metieras en cada uno de los personajes y ves con sus ojos, sientes con su corazón y piensas con su cabeza. Tú eres cada personaje.

-¿Siguen viviendo Step, Babi y Gin sus vidas dentro de su cabeza?

-Los primeros cuatro días después de terminar la novela, por primera vez he sentido el dolor de las últimas páginas, pero luego entendí que mis personajes siempre estarán conmigo e incluso me acompañan ahora en España para hablar de su historia.

-Sabe tocar el corazón de los jóvenes, cosa que muchos padres desconocen.

-Creo que los padres no deben insistirles con sus propias convicciones. Deben dejarlas a parte. No hay que hablarles tanto sino escucharles para entender lo que quizás puede haber detrás de lo que nos están diciendo o haciendo. Pensar solo que tu hijo por ser joven es inmaduro, es no tener en cuenta que realmente tiene su propio carácter, sus problemas y aspiraciones y que para él son muy importantes aunque nos parezcan menores. Por eso creo que mis lectores más jóvenes han apreciado que no alecciono, no lanzo moralejas, solo cuento una bonita historia de amor y amistad.

-¿Ya se ha dicho todo sobre el amor?

-No, lo bonito del amor es que siempre consigue sorprendernos porque es un tema en el que nadie podrá poner la última palabra.

-¿Cómo se vive el amor en Italia?

-No hay una dependencia estética en el amor que, en mi opinión, nos quitaría muchas cosas. La mujer imperfecta es aún más bella y especial sobre todo si te gustan esos detalles personales e imprecisos que te han enamorado de ella.

-¿Ha escrito el final que sus lectores le pedían?

-No puedo hacer un trabajo de inspiración sintiéndome condicionado para contentar a la gente. Soy independiente, escribo en una pequeña buhardilla, entre el silencio y la música de la radio. Y en lo único que pienso es en mis personajes: Step, Babi y Gin.

-El candado es ya un símbolo. ¿La llave va a estar al mismo nivel?

-Por qué no. En este libro aparece la llave de la felicidad, el símbolo para conducirnos a la puerta tras la cual podemos llegar a ser felices. Así que la llave puede ser un precioso regalo que hacer.

-¿Qué proyectos tiene a la vista?

-Ahora mismo quiero entender cuáles van a ser las reacciones de los lectores de Tres veces tú porque es un libro complicado y complejo. Sus reacciones darán lugar a un nuevo libro o una nueva película.

«TRES VECES TÚ»

AUTOR FEDERICO MOCCIA

EDITORIAL PLANETA 818 PÁGINAS 17,95 EUROS

Las vidas de los protagonistas, seis años después