El campo se beneficia de la lluvia pero se enfrenta a los hongos y al mildiu
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Técnicos de Areeiro advierten sobre la repentina subida de las temperaturas, que favorece la reproducción de bacterias
10 may 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Una de cal y otra de arena. Así interpretan los técnicos de la Estación Fitopatolóxica de Areeiro lo que ocurre últimamente con el tiempo en la comarca, donde tras una pertinaz sequía que amenazaba la cosecha llegaron unas lluvias abundantes que fueron muy bien recibidas pero que en algunos casos vinieron acompañadas de granizo. Y ahora, tras un mes húmedo, se acerca una ola de calor africano que amenaza con inundar los campos de plagas.
Por eso el director del centro dependiente de la Diputación de Pontevedra hace una llamada de atención a los agricultores para que estén atentos, porque las circunstancias ambientales son, estos días, muy favorables para la reproducción de bacterias.
Las lluvias del mes de abril y lo que va de mayo fueron muy favorables para la cosecha, que amenazaba con perderse por culpa de la sequía de buena parte del otoño y todo el invierno. Claro, que en algunos casos se produjeron tormentas localizadas de granizo que echaron por tierra algunas plantaciones de kiwi en Campo Lameiro y también de manzana.
Por lo tanto, el campo está ahora en un momento óptimo. Pero en los últimos días ya han subido las temperaturas y a lo largo de esta semana seguirán en ascenso hasta llegar incluso a los 30 grados, y todo ello sin que desaparezca la humedad, lo que produce un caldo de cultivo perfecto para la aparición de las plagas. El mildiu en los viñedos y otros hongos en otras especies amenazan unos cultivos que en la actualidad se encuentran, en general, en buen estado de maduración.
«Ahora se corren una serie de riesgos -advierte Pedro Mansilla-, porque es bueno que suban las temperaturas, pero en los viñedos el mildiu va a empezar con fuerza, porque hemos tenidos lluvias y las temperaturas subieron de golpe, y ya se ven por ahí las manchas de mildiu, o sea, que los agricultores tienen que estar muy atentos».
Ya la temperatura de estos días, en torno a los 18 y los 20 grados, entraña peligro cuando va acompañada de una humedad tan alta, pero el calor será todavía más intenso, «y es el momento de proteger los cultivos porque los hongos se pueden manifestar en cualquier momento».
«La lluvia vino como agua de mayo, pero ahora llega la contrapartida con la humedad y el calor»