La troika que forman el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Comisión Europea y el Banco Central Europeo ha vuelto a exigirle al Gobierno griego que reduzca el salario mínimo por debajo de los 600 euros actuales, una petición que los sindicatos rechazaron de plano. Según una carta filtrada por la emisora Skai, y difundida por Efe, la troika ha exigido a través del Ministerio de Trabajo la adopción de la medida, incluso a través de un decreto si es que no se logra un acuerdo entre patronal y sindicatos.
El salario mínimo mensual, una vez abonadas las cuotas a la seguridad social, es de 600,79 euros, que baja a los 500 para los empleados menores de 25 años.
La patronal está dispuesta a que el salario mínimo no se reduzca, siempre que se bajen salarios.