«Naceume marihuana na horta!»

Carmela López
carmela lópez FERROL / LA VOZ

SAN SADURNIÑO

JOSE PARDO

Maruxa Bouza, vecina de San Sadurniño, no podía dar crédito al fruto de su cosecha tras sembrar semillas para pájaros

18 mar 2017 . Actualizado a las 14:27 h.

Maruxa Bouza Muíño, conocida por Maruxa da Laxe, es la protagonista de un vídeo que se ha hecho viral en las redes sociales y que fue grabado por su amiga Carmiña Couce. Las dos son vecinas de San Sadurniño y participan, junto con otras tres mujeres, en un programa que se desarrolla a través del Aula Cemit y que tiene por objeto difundir «os valores do traballo no rural».La fama de la que están gozando encantadas estos días les llegó a raíz de la aparición de una planta de marihuana en el huerto que Maruxa da Laxe cultiva con esmero.

Según explica esta mujer, de 69 años, el experimento que están compartiendo consiste en plantar especies que no son propias de aquí, como azafrán, cacahuetes, jengibre, trigo sarraceno, lentejas, garbanzos castellanos o ruibarbo. Pero, sin buscarlo, la plantación incluyó un ejemplar que Maruxa no conocía.

Todo comenzó cuando los pájaros y los ratones le echaron a perder las plantas de cacahuete, por lo que decidió comprar un paquete de alimento para loros, que incluye semillas de maní sin tostar. «Sementei todo e saíron xirasoles e cacahuetes, pero no medio apareceu unha planta rara, que non sabía o que era, polo que mirei en Internet e descubrín que era marihuana», comenta entre risas. Añade que había otra, que no era exactamente igual, «pero dixéronme que hai machos e femias, non sei se é así ou non».

El descubrimiento fue motivo de muchas bromas, entre las que destaca la que Maruxa y Carmiña inmortalizaron en su vídeo, en el que se preguntan si irán a la cárcel si las descubren o si la marihuana se esnifa o es para fumar. Las dos mujeres ríen a carcajadas y se inquieren una a la otra sobre si ya han consumido algo o es el ambiente el que provoca su buen estado de humor.

Nueva cosecha

Al final, ni la esnifaron ni la fumaron, ya que la planta se murió por sí sola en el huerto de Maruxa cuando le llegó el momento. «Deixeina estar aí ata que secou», comenta la mujer, por lo que es probable que, si de nuevo enraízan las semillas, este año la plantación pueda ser mayor.

Su familia acogió con la normal sorpresa el nuevo cultivo de Maruxa. «Os meus fillos ríronse moito», apunta, al igual que su marido y el vecindario en general. Los que sí llegaron a buen término fueron los cacahuetes, que maduraron. «Tostámolos e están moi bos», apunta Maruxa, que invita a seguir el experimento en el que ella está inmersa, junto con otras cuatro vecinas de San Sadurniño.

«Experiencia muy valiosa»

A través del Aula Cemit están viviendo una experiencia que califica de muy valiosa, porque les permite demostrar que aquí también se pueden cosechar cultivos propios de otras latitudes.

En cuanto a la grabación del vídeo por parte de Carmiña, también es fruto de los conocimientos adquiridos en el Aula Cemit de San Sadurniño, cuya implantación en este municipio está a punto de cumplir tres años.

La primera temporada se centró en la dinamización de las nuevas tecnologías. Las participantes en el programa aprendieron a utilizar un smartphone, a moverse por las redes sociales y a grabar vídeos.

Después vinieron los huertos experimentales en los que todas están cultivando plantas no habituales en esta zona y sus aportaciones al ámbito del trabajo rural las comparten con el mundo mediante el uso de su ya buen hacer en las redes sociales.