La selección de los encargados de emitir el veredicto se realizará el día 9 de enero
23 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La Audiencia Provincial de A Coruña ya tiene todo dispuesto para el enjuiciamiento, por la Ley del Jurado, de Juan Fraga Allegue, el vecino de Narón de 79 años que permanece en prisión preventiva desde enero por la muerte violenta de su esposa, Caridad Pérez Calderón, ocurrida el 29 de diciembre del año pasado en el domicilio familiar de O Couto. El juicio se celebrará del 9 al 13 de enero y ya se efectuó el sorteo del jurado, del que salieron 36 personas entre las que, el propio día 9, se seleccionará a los nueve miembros del jurado que se encargarán de emitir el veredicto.
El tribunal ha accedido a una petición de la defensa del acusado, representada por el abogado ferrolano Julio Barros, acordando que los miembros del jurado se desplacen a O Couto para una inspección ocular. Se trata de verificar la versión de un testigo que en su día declaró haber visto en el tejado de la vivienda del matrimonio a una persona que podría ser el marido de la fallecida.
Se desconoce cuándo se verificará dicha prueba, que tendrá que hacerse en horario nocturno, porque el testimonio se refiere a las ocho y media de la madrugada, pero tendrá que ser uno de los cinco días fijados para el juicio.
La defensa argumenta en que en invierno a esas horas de la mañana casi no es posible ver el tejado de la casa desde la distancia a la que se encontraba el vecino y mucho menos identificar a la persona que pudiera estar allí.
El abogado defensor solicita en su escrito la libre absolución de su representado, por entender que la acusación se fundamente en indicios y no en pruebas.
La Fiscalía, por su parte, pide la condena de Juan Fraga Allegue a la pena de 15 años de prisión como autor de un delito de homicidio. En sus conclusiones provisionales señala que el acusado se levantó antes que su esposa, que entre las 8.00 y las 8.30 horas regresó a la habitación y cuando la mujer se puso en pie la atacó con varios golpes muy violentos en la cara hasta dejarla aturdida, para después agarrarla por detrás y propinarle repetidos cortes con un cuchillo muy afilado, primero en la cabeza, luego en el lado derecho de la cara y finalmente en el cuello.
Simulación de robo
El fiscal continúa diciendo en su escrito que, con la finalidad de no ser descubierto, el marido se lavó, limpió el cuchillo empleado y trató de eliminar todos los restos de sangre. Antes de abandonar la vivienda, y con intención de simular un robo, vació algunos cajones del otro dormitorio y cogió un puñado de joyas que depositó bajo la alfombrilla del maletero de su vehículo.
Por su parte, la acusación particular, ejercida por un hijo del matrimonio, solicita para el acusado la pena de 20 años de prisión por un delito de asesinato, cometido con alevosía y ensañamiento.
Al relato de hechos apuntado el Ministerio Fiscal añade que el acusado, a fin de consolidar todavía más lo que consideraba su coartada, la mañana de autos antes de regresar al domicilio entró y salió de diversos lugares que tenían sistemas de grabación, a fin de ser registrado por las cámaras. Estuvo acompañado por un amigo con el que accedió a diferentes dependencias oficiales sin necesidad de hacer gestiones precisamente ese día.