Navantia avanza en la conversión de Ferrol en su astillero inteligente

Beatriz García Couce
Beatriz Couce FERROL

FERROL CIUDAD

CESAR TOIMIL

La empresa pública licita la asistencia técnica para construir el dique cubierto

04 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

«Para Navantia, el Astillero 4.0 no es una opción, es una auténtica necesidad, pues se trata de garantizar su supervivencia en el medio y largo plazo». La transformación de la factoría ferrolana se ha convertido en uno de los proyectos de mayor envergadura para la compañía pública, que precisa incrementar sus niveles de eficiencia y competitividad y reducir los plazos de construcción de los buques.

La compañía que preside Esteban García Vilasánchez entiende que «el Astillero 4.0 requerirá un incremento de los procesos automatizados o robotizados, con sistemas digitalizados de control de proceso. Será un lugar lleno de máquinas y robots, que procesarán materiales y equipos, con una inteligencia que ha de nacer de su cadena de suministro, y cuyo producto final serán los barcos inteligentes, los cuales mantendrán ese nivel a lo largo de toda su vida». Para ello, ha diseñado un proyecto que supondrá una auténtica revolución no solo en cuanto a los procesos, sino también a las infraestructuras. Después de dar los primeros pasos administrativos ante la Xunta para la tramitación de esta ambiciosa actuación, Navantia acaba de abrir una licitación para contratar una asistencia técnica para la implantación del Astillero 4.0 en Ferrol, por 1,4 millones de euros.

La empresa pública considera indispensable maximizar el uso de los procesos a cubierto que se realizan durante la fabricación y el armamento del buque, por lo que tiene entre sus infraestructuras principales a desarrollar un dique seco cubierto, que contribuiría en gran medida a recortar tanto los costes como los plazos, dando un salto cualitativo a su competitividad frente a otros astilleros. 

En la campa este

La compañía prevé concentrar el proceso de fabricación en la denominada campa este, en el espacio anexo a las gradas actuales, ocupando una superficie aproximada de 300.000 metros cuadrados.

Además de pasar de construir en grada a hacerlo en un dique -como hace Navantia en su astillero de Puerto Real (Cádiz)-, también prevé concentrar otras instalaciones necesarias para la fabricación de los buques en torno al futuro dique cubierto, levantando para ello nuevos talleres.

Aunque oficialmente la compañía pública no ha cuantificado el presupuesto de la inversión global que supone la implantación de este proyecto, distintas fuentes apuntan a que solo para la construcción del dique seco se requerirá de al menos 140 millones de euros.

Navantia pretende ligar el desarrollo de estas ambiciosas actuaciones a la construcción de las futuras fragatas F-110 para la Armada española, cuya orden de ejecución se espera para el próximo año.

Las empresas interesadas en concurrir a la licitación de la asistencia técnica disponen hasta el día 29 para presentar las correspondientes ofertas.

Varias naves y tres muelles de grandes capacidades figuran en el proyecto 

En el proyecto de implantación del Astillero 4.0 no solo se encuentra la construcción de un dique cubierto, sino también de otras instalaciones complementarias. De acuerdo con el proyecto diseñado por Navantia, el dique tendrá unas dimensiones de 360 metros de largo por 65 de ancho, dentro de una nave que contaría con espacio para llevar a cabo operaciones de premontaje. 

Además, se prevé la construcción de otras naves de aceros, de prefabricación y de armamento, y la habilitación de tres muelles de 273, 200 y 350 metros, con calados de 10 metros, para la realización de actividades de armamento a flote y operaciones asociadas al dique.

La ejecución de las infraestructuras y el desarrollo del resto de los procesos implicarán además la ocupación en planta de más de 70.000 metros cuadrados de lámina de agua, y requerirá de «la ampliación del ámbito del astillero, lo cual implica la necesidad de adecuar los documentos urbanísticos asociados según la legislación vigente, con la participación de numerosos organismos, así como la obtención de diversas autorizaciones de carácter sectorial».

En este sentido, la empresa pública prevé que, entre otros, intervengan el Ministerio de Defensa, el de Agricultura, la Dirección General de Costas, el Puerto, el Concello de Ferrol, Aguas de Galicia, la Consellería do Mar, la escuela Antonio de Escaño, las cofradías de pescadores y las industrias auxiliares, entre otros organismos y entidades.