El intenso calor de la primavera merma la producción de pimiento de O Couto

FERROL CIUDAD

JOSÉ PARDO

En los invernaderos se llegaron a registrar 50 grados y algunas plantas se quemaron

24 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Las elevadas temperaturas registradas esta primavera y comienzo del verano han mermado en un tercio la producción de pimiento de O Couto que se cosecha bajo invernadero. Así lo indican algunos productores, como es el caso del vecino de O Val Juan Fraga, quien manifiesta que en los túneles, incluso en los abiertos por los lados, se llegaron a alcanzar temperaturas de hasta 50 grados.

En esas condiciones, en un primer momento las plantas perdieron parte de la floración y además secaron algunos pies, llegando incluso a quemarse los pimientos cuando estaban en fase de crecimiento.

Juan Fraga asegura que nunca le había pasado nada así y que la consecuencia fue la pérdida de un tercio de la producción, pero que otros agricultores le comentaron que su situación todavía era más grave.

Según explica este cultivador de pimientos de O Couto, él pudo salvar la mayor parte de su cosecha porque sus invernaderos se abren por los cuatro lados y además colocó telas de sombrero, pero en los de túnel solo es posible abrir las cabezas y la temperatura en el interior sube mucho. En algunas jornadas las máximas de entre 47 y 50 grados en el interior de estas estructuras hacían imposible que una persona pudiera estar trabajando en los invernaderos a partir de las once de la mañana.

Marta Novoa, productora de pimiento de O Couto en la parroquia fenesa de Maniños, también manifiesta haber tenido pérdidas a causa de las altas temperaturas, si bien en su caso las sitúa entre el 15 y el 20 %. En sus instalaciones también colocó mallas de sombreo, pero aún así se le quemaron algunos plantas por la elevada radiación solar.

Según indicó, el calor llegó muy pronto este año, provocando un crecimiento muy rápido de las plantas, que lo hicieron con poca raíz, por lo que no fueron capaces de bombear todo el agua y los nutrientes que necesitaban para subsistir.

Esta productora fenesa asegura que la combinación de calor y humedad propició que también se produjeran más hongos de lo habitual.