La ciudad menguante

Beatriz García Couce
Beatriz Couce EN LA GRADA

FERROL CIUDAD

04 may 2017 . Actualizado a las 11:16 h.

Son Cartagena y San Fernando dos ciudades que tienen algunos paralelismos con Ferrol. Debido a que las tres albergan instalaciones militares y también astilleros de Navantia, el flujo de personas entre este triángulo geográfico se mantiene, aunque con mayor o menor intensidad, dependiendo frecuentemente de decisiones políticas. Museos navales, antiguas instalaciones militares que se han reconvertido para usos universitarios, por ejemplo, convenios con el Ministerio de Defensa que se eternizan, transferencias a las comunidades de los antiguos hospitales navales, entre otros, son algunos de los denominadores comunes que mantienen las tres ciudades a las que, por supuesto, además de los centenares de kilómetros que las separan, también las alejan otras circunstancias. Pero si hay alguna que me llama especialmente la atención es que frente a la sangría demográfica que ha padecido Ferrol en las últimas décadas, que la ha convertido en una auténtica ciudad menguante -el último dato estadístico del INE es demoledor, dejando el censo con 67.500 vecinos-, los otros dos municipios continúan su auge poblacional.

Un simple paseo por las calles de ambas ciudades hermanas permite comprobar hasta qué punto se nos va la vida en esta ciudad. Somos conscientes en nuestro día a día, con calles vacías y un envejecimiento palpable. Huyamos de los reproches de quién hizo y quién no, conscientes de que no hay medidas milagro para solventar la situación a corto plazo. Pero aquí se vive bien, cómodo y barato. Luchar contra la despoblación exige trabajo serio y continuado.