Cristina Blanco rueda una película en directo en su espectáculo «El Agitador Vórtex»
24 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Hoy • Teatro Jofre • 21.00 horas • 5 euros • Un agitador vórtex es un aparato que habitualmente se utiliza en los laboratorios para agitar tubos de ensayo y mezclar diferentes líquidos en espiral. Pero también es el enigmático título del sorprendente y original espectáculo que esta noche se presenta en el teatro Jofre de la mano de la actriz madrileña afincada en Barcelona Cris Blanco. «Le puse ese nombre porque cuando me puse a crear esta pieza siempre tuve claro que quería mezclar y agitar diferentes géneros y formatos del cine y del teatro», apunta esta profesional de la escena formada en la Real Escuela de Arte Dramático de Madrid (Resad).
Pero, ¿qué es exactamente lo que se va a encontrar el público que esta noche se acomode en las butacas del Jofre? Que nadie se espere una obra convencional cuando se alce el telón, porque lo que le aguarda al respetable no es ni más ni menos que el rodaje de una película en vivo y en directo. Para ello, Cristina Blanco se meterá en la piel de una directora «en apuros», que tendrá que lidiar con un sinfín de obstáculos para poder llevar a buen fin su proyecto cinematográfico.
Sobre el escenario, el público podrá ver a la actriz metida en su papel de realizadora rodando las diferentes escenas -incluyendo para ello rudimentarios efectos especiales «hechos a mano»-, mientras que en una gran pantalla se proyectarán las filmaciones que hace en cada momento. «De esta forma, la gente puede ver al mismo tiempo la película y su making off», apunta una actriz que siempre busca sorprender y emocionar al público.
Según explica Blanco, el filme que rueda la protagonista de la pieza no es un western, ni una cinta de ciencia ficción, ni tampoco un musical o un thriller, sino todo eso a la vez. «Además, juego con elementos de diferentes géneros para demostrar el papel que tienen en el cine. ¿Qué pasa, por ejemplo, si le sacas la música de miedo a una película de terror? Pues que no asusta nada de nada y aquí me presto a ese juego poniendo música de zarzuela a una persecución», anota Castro.
Si a todo eso se le añade un aderezo de humor salpimentado con un puñado de situaciones hilarantes, el resultado resulta rompedor... Y, sobre todo, muy divertido. «Yo no soy cómica ni esto es un espectáculo de Los Morancos, pero la gente se ríe mucho y lo pasa bien».