Un referente de psiquiatras

Antonio Núñez Pérez OBITUARIO

FERROL CIUDAD

21 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Rafael González Palacios forma parte de un pequeño pero fundamental grupo de psiquiatras que, formados y habiendo trabajado en el extranjero, (en su caso Canadá, Gran Bretaña e Irlanda) deciden generosamente regresar a España y aportar sus conocimientos, como siempre desearon e intentaron infructuosamente, a su propio país. Se trataba de iniciar la reforma y modernización de la asistencia psiquiátrica pública. El proyecto, liderado por el Dr. Montoya, se inició en Oviedo pero las condiciones sociopolíticas del país abortaron violentamente toda posibilidad de convertir un manicomio en un hospital psiquiátrico. El Dr. González Palacios, intentando dar otra oportunidad a él mismo y a su país, pasa al Hospital de Albacete, pero en 1973 decide aceptar la oferta del Hospital Psiquiátrico de Irlanda en el que había trabajado antes del sueño fallido de Oviedo.

Oposita en 1976 a la plaza de Jefe de Servicio cuando la Diputación de La Coruña inicia la Reforma en Conxo y su reorganización en sectores territoriales ejerciendo hasta su jubilación en 1999 la jefatura de Psiquiatría de Ferrol a la vez que de profesor asociado de Psiquiatría de la Universidad de Santiago de Compostela. Desde la misma propició que Ferrol fuera, junto a Leganés, área piloto de la OMS en Salud Mental en la década de los 80, así como la integración de la asistencia psiquiátrica en el Sergas y la apertura del Hospital Psiquiátrico de Día en la década siguiente.

El Dr. Palacios tenía una presencia discreta, una visión cosmopolita del mundo, sin que por ello nunca atropellara a nadie con su infinito saber. A pesar de su origen andaluz su estilo era más británico que mediterráneo, lo que sobre todo en los primeros tiempos de su regreso, no pasaba desapercibido a su pesar. Poseía un talento inusual de sabio discreto y receptivo, erudito cuando quería dado su vasto saber y cultura a la vez que huidizo del estrellato profesional o académico. Tolerante como era, en las reuniones tenía la inquietud del conocer y sobre todo escuchar, para acabar incorporando su visión lucida y sensata con aportaciones antropológicas en ocasiones filosóficas o literarias. Flexible en sus análisis de las diversas teorías que influyen en la Psiquiatría, consideraba de vital importancia la historia clínica de los pacientes siendo las suyas de una finura fenomenológica, descripción nosológica y exquisita construcción literaria, por lo que le veníamos animando a su agrupamiento y publicación lo que fue posponiendo, siendo una tarea pendiente dado su valor como expresión de una importante y proteica forma de ejercer la profesión.

Maravillaba su prodigiosa capacidad de conectar emocionalmente con los pacientes, manteniendo al mismo tiempo la objetividad necesaria para evaluar su estado mental y esa frontera, a veces difusa, que separa la mente sana de la enferma así como para estructurar los procesos terapéuticos. Sin ser dogmático, nos inculcó que en la Psiquiatría, y en general en la ciencia, las verdades no se inventan, las verdades se descubren. Ya jubilado nos insistía a algunos de nosotros, que los profesionales de la salud no debemos olvidar nuestras raíces, pues consideraba que el ejercicio médico era un acto de amor, de humildad, cuyo objetivo único es el bien del paciente. Aún impresionados por la noticia de su fallecimiento el pasado 6 de enero de 2017, y entristecidos porque ya no contaremos con su presencia, discreta y sosegada, sus compañeros, amigos y alumnos del Servicio de Psiquiatría de Ferrol, de San Pedro de Leixa y del Psiquiátrico de Conxo así como otros muchos de nuestra y otras especialidades queremos poner de manifiesto que para nosotros «el Dr. Palacios» constituyó un referente por lo que su espíritu y ejemplo seguirá siempre con nosotros. Descanse en paz.

Antonio Núñez Pérez. Jefe Servicio Psiquiatria. EOXIFerrol-Sergas