En las calles de Ferrol hay 40 cámaras de videovigilancia grabando siempre

FERROL CIUDAD

CESAR TOIMIL

Los equipos de algunas oficinas bancarias también toman imágenes del exterior

08 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La instalación de cámaras de videovigilancia está regulada por la ley y su control compete a la Agencia Española de Protección de Datos. La captación de imágenes de la vía pública solo está permitida en el caso de edificios oficiales, principalmente en los relacionados con la seguridad, como es el caso de las dependencias de la Guardia Civil y la Policía Nacional.

En Ferrol hay algo más de 40 cámaras distribuidas por distintas zonas del centro de la ciudad que graban a viandantes y vehículos, si bien su objetivo principal es garantizar la seguridad de los espacios en los que se encuentran.

El mayor número de dispositivos de este tipo se encuentra en las instalaciones dependientes del Ministerio de Defensa, comenzando por las dependencias de la residencia militar La Cortina y terminando en la Escuela de Especialidades Antonio de Escaño. A lo largo de toda la muralla se pueden ver alrededor de 14 cámaras de videovigilancia que abarcan el perímetro de la acera y la calle.

La residencia militar de la calle María también está dotada de videovigilancia exterior.

En el cuartel de la Guardia Civil, situado en la calle Virgen de la Cabeza, hay otras siete cámaras colocadas estratégicamente bordeando el perímetro de los edificios. Otro tanto ocurre en el edificio dependiente de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía situado en la plaza de San Amaro, que está jalonado por siete cámaras que abarcan el frente, las dos escalinatas laterales y un tramo de la calle de Lugo.

Por su parte, los juzgados de Ferrol tienen un sistema de videovigilancia que incluye seis cámaras que cubren el perímetro exterior y otras interiores que cubren las tres entradas, incluyendo la puerta del edificio antiguo que permanece siempre cerrada.

La Comisaría de Policía de la avenida de Vigo tiene otras tres cámaras instaladas en la fachada, una de ellas dirigida hacia la calle Pascual Veiga, en la que estacionan los coches patrulla.

Los restantes dispositivos que graban la vía pública en Ferrol están instalados dos en el edificio administrativo de la Xunta de Galicia, ubicado en la plaza de España y otras dos en la estación de ferrocarril.

En las dos fachadas del supermercado Hipercor -calles María y Dolores- también se puede observar un dispositivo de videovigilancia en cada una de ellas.

Por su parte, las oficinas bancarias también cuentan con cámaras de videovigilancia, que, si bien están instaladas en el interior, las situadas en los cajeros automáticos permiten ver algo de la calle. Disponen, asimismo, de equipos de vigilancia los dispensadores automáticos de productos que funcionan las 24 horas del día.

De las imágenes que graban estas cámaras son responsables las entidades de titularidad privada a las que pertenecen, que solo podrán ponerlas a disposición de las autoridades judicial y de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, a las que tendrán que facilitar de forma inmediata las que se refieran a la comisión de hechos delictivos.

En principio, dichas imágenes solo podrán ser visualizadas por la Policía, la Guardia Civil, los jueces y tribunales, así como la Inspección de la Agencia Española de Protección de Datos.

Por su parte, la captación de imágenes en entornos escolares no está vedada, pero requiere adoptar ciertas cautelas. La instalación de cámaras de videovigilancia en un centro escolar con el fin de controlar conductas que puedan afectar a la seguridad debe ser una medida proporcional con la infracción que se pretende evitar y en ningún caso puede ser utilizada como medio inicial para llevar a cabo funciones de vigilancia. De ahí que los dispositivos solo puedan instalarse en zonas comunes susceptibles de ser utilizadas para causar daños a menores, pero no en las aulas ni en los espacios a los que los escolares no tienen acceso.