Vengan y pasen

Manuel Couce DESDE LA ALAMEDA

FERROL CIUDAD

04 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Si quieren escuchar palabras en desuso normal, acérquense a la Plaza de Armas, en el salón de extorsiones del Ayuntamiento el espectáculo está servido, con actores en plena forma empleando el dinero de los ciudadanos para complicarle la vida al alcalde. Si alguien aspira a ver un pleno riguroso y exhaustivo sobre los relevantes problemas de la ciudad, no vaya allí. Solo hay un confortable, estético y sabio escenario en paredes, donde recuerdan aquellas palabras de Amable Dopico: Sin una ciudad no hay filósofos. Pues por lo visto con los debates sobre como distribuir el esfuerzo que aportamos los ciudadanos no hay manera -me dicen que no se hablan entre partidos-. Se saludan por bajines y otro sin fin de derivaciones. Esto viene ocurriendo, y quien lleva la manija son los restos que quedan de los socialistas en el Ayuntamiento, pues todavía no se acomodaron a su nueva etapa, después de que su portavoz se cansara de dar el abrazo del oso al alcalde, con aquel acuerdo que iba a durar hasta el final del mandato. Y periclito en un año, ahora se dedican a complicarle la vida a toda la corporación. Y de ello se supo aprovechar muy espabiladamente el PP, que con el apoyo de los susodichos, en la oposición, les queda el poder de la palabra y la mayor parte de la pasta con las dedicaciones exclusivas. Con esta falsificación de lo correcto, han dejado al alcalde como a un león en agonía, y poco más le queda ya que apaciguar y deshacer nudos. Esto no es normal en una ciudad seria como esta. Pero entre tanta anormalidad se está perdiendo un tiempo precioso y diciendo palabras gruesas que hacen llevarse las manos a la cabeza a los ferrolanos. Y mientras esta parodia continúe, los del grupo popular brindando con cava, los nacionalistas con zumos, intentando echar una mano a Jorge Suárez, Ciudadanos alejándose de la palangana de Pilatos y en Marea viendo como la piel de la ciudad se va arrugando y los enanos del circo creciendo.

Señores concejales, de esta carga hay que desembarazarse y pasar al respeto cuanto antes. Algunos vecinos tienen la impresión de que esta ciudad es un rincón de asfalto rodeado de gasolineras con unos astilleros parados por culpa de los políticos. Ferrol tiene un paisaje y un paisanaje que no falla nunca, y este espectáculo que vivimos actualmente en la plaza de Armas tiene que cambiar drásticamente si quieren calmar la exasperada opinión de ferrolanos y ferrolanas que claman por resultados y por ver otras imágenes de sus representantes.