La asociación ASCM de personas con discapacidad detecta decenas de problemas, en especial en A Malata y Caranza
30 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La entidad ASCM que vela por los intereses de personas con algún tipo de discapacidad ha testado la accesibilidad en los cuatro polideportivos (Esteiro, A Malata, Caranza y Ensanche). Todos suspenden, en especial, el de A Malata, donde el porcentaje de barreras llega al 68 %, seguido del Caranza (un 54 %), el de Esteiro (un 53 %) y el del Ensanche (un 49 %).
Cuestiones como que ninguno tenga ascensor o escaleras mecánicas para salvar tramos con peldaños y que hacen que las personas que se mueven en sillas de ruedas no puedan acceder a las gradas son algunas de las que se documentan en un estudio con abundante material fotográfico y más de 300 páginas.
Otro de los capítulos en los que se incide es la falta de aseos, vestuarios y duchas adaptadas. En los pocos espacios que cuentan con alguno de estos elementos son insuficientes y en el caso de que un equipo entero tuviese que usarlos tardarían horas en asearse tras un partido.
Los espacios para aparcar también están mal señalizados y en algunos casos ni siquiera están reservados. Los autores del estudio explican que se elaboró a lo largo del presente año y que se tuvieron en cuenta los criterios del decreto 35/2000, a la espera de que se renueve esta norma, algo que sucederá en breve. En cualquier caso, el técnico de accesibilidad, Diego Sande, apunta que ningún recinto llega ni al 50 % de accesibilidad.