El fuego cruzado entre Méndez y Sestayo hurga en las heridas del PSOE ferrolano

FERROL CIUDAD

JOSÉ PARDO

La concejala pide a la secretaria general que dimita tras haber pedido su suspensión

22 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Si restaba alguna mínima duda sobre la profunda división existente en el PSOE ferrolano la profunda crisis que lo sacude desde hace tres semanas la ha despejado. Los socialistas airean diferencias y descalificativos al mismo ritmo que se agrava la situación del que ya es la tercera formación en la ciudad. La concejala no adscrita, pero todavía militante del PSOE Rosa Méndez, y la secretaria general de los socialistas ferrolanos, Beatriz Sestayo, afilaron ayer lenguas y echaron a volar los cuchillos en una escenificación verbal del cruento enfrentamiento que todavía no ha tocado a su fin.

La ejecutiva local, como confirmaron fuentes de este órgano, ya que Sestayo se negó ayer a hacer declaraciones, decidía pedir la suspensión de militancia de la edila y elevar la petición a Ferraz. Y Méndez, a la que esa misma ejecutiva expulsó del grupo municipal, no se quedó callada: «Estamos nun escenario dramático. Sinceramente, a secretaria xeral debería estar empezando a conxugar o verbo dimitir». No solo por esto, dijo. Ni porque en la asamblea del jueves se hubiese impedido votar una postura respecto a la posible abstención socialista en la investidura de Rajoy. «Por moitas máis cousas», dijo enigmática. Porque, advirtió, «podería facer moitísimas declaracións e estar todos os días ocupando portadas». Y reprocha a Sestayo «estar levando problemas orgánicos á prensa en beneficio propio», algo que califica de «deslealdade».

Méndez todavía aguarda por la mediación solicitada al partido, que no acaba de llegar y que solo ha confirmado oficialmente que ha elevado su situación al pacto antitransfuguismo.

Mutismo

Pese al impostado mutismo de ayer, Sestayo sí habló de la asamblea y de las acusaciones de la concejala en una radio local Y también se despachó a gusto: «Rosa Méndez optou por permanecer no goberno frente aos compañeiros que Jorge Suárez botou. Optou por quedarse e ascender nunha xunta de goberno local no canto de ser solidaria coa disciplina, coas siglas do seu partido, co programa e cos votantes socialistas», declaró.

Sobre la petición de dimisión, espetó: «Supoño que será un desexo de Jorge Suárez, do que Rosa Méndez é leal transmisora». Defendió que todos los cargos que ocupó «sempre os ocupei porque fun elixida polos meus compañeiros militantes en asambleas». Pero, asestó, «lamentablemente, todas as veces que Rosa Méndez se presentou nunha asamblea para diferentes cargos sempre foi rexeitada polos seus compañeiros».

El enfrentamiento entre ellas solo adelanta el que, más pronto que tarde, llegará a una asamblea ordinaria a la que se pretende llevar la suspensión de Rosa Méndez y abordar la situación municipal. Prevista inicialmente para este domingo, la coincidencia con el comité federal hizo a la ejecutiva desistir y por el momento carece de fecha.

Sestayo tiene a su favor la ejecutiva y, mientras no se demuestre lo contrario, también la mayoría de la asamblea. Pero en la agrupación hay al menos dos corrientes críticas que ponen desde hace tiempo en tela de juicio su labor: el ligado a la conocida popularmente como vieja guardia, que encabeza el senador Ángel Mato, y una tercera vía que lidera la que fue candidata a las generales por Ferrol, Eva Martínez Montero. La lucha por el control del partido de cara a las próximas municipales marcará el rumbo de la agrupación a corto y medio plazo.