El«Cantabria» y la F-102 certifican su capacidad en Escocia

FERROL CIUDAD

Los dos navíos con base en Ferrol participan durante once días en un adiestramiento con las flotas de la OTAN

12 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Al norte del Reino Unido, en la costa oeste de Escocia, más de un centenar de porciones de tierra rompen el monólogo azul del océano Atlántico. Son las islas Hébridas, con nombres que reflejan, derivados de diferentes lenguas, las influencias célticas, nórdicas y británicas de las personas que las habitaron. A un paso del archipiélago, desde el pasado lunes, la fragata Almirante Juan de Borbón (F-102) y el buque de apoyo logístico Cantabria adiestran al lado de otras unidades para certificar su capacidad y, en conjunto, determinar si la Fuerza de Respuesta Marítima de la OTAN está preparada para el año 2017.

El Noble Mariner, el ejercicio en el que participan por parte de la Armada los dos navíos con base en Ferrol y la fragata Victoria, se celebra hasta el jueves 20 de octubre. Once días para confirmar el estado idóneo de las flotas de la Alianza Atlántica, mediante una serie de misiones y tareas, todas ellas de adiestramiento, de alta intensidad. Además, este año se combina con una actuación similar del comando aéreo, el Noble Arrow, y con otra liderada por la Marina británica, el Joint Warrior. Tres ejercicios que ayudan al trasvase de conocimientos entre formaciones de dieciséis países, la denominada interoperabilidad, que fortalece el desarrollo de capacidades, la postura de defensa y la estabilidad del proyecto fuera de las fronteras de la OTAN. Al practicar con otras naciones, otros equipos y otro personal, todos basados en los mismos estándares de la Alianza, las condiciones serán idóneas en caso de que surja, en los próximos meses, una situación en el mundo real.

La fragata Almirante Juan de Borbón participa como buque de mando de la Agrupación Naval Permanente número 1, lo que le otorga una posición protagonista en la práctica totalidad de los movimientos de la coalición internacional en aguas británicas. Mientras, la labor del Cantabria, al tratarse de un buque de aprovisionamiento de combate, se basa en la ayuda continua en el mar a los navíos que participan en los ejercicios a los que proporciona, por ejemplo, combustible.

Ambas embarcaciones regresarán en diciembre al Arsenal de Ferrol, por lo que el Noble Mariner es únicamente el primero de muchos encargos con la OTAN.