Cuatro embarcaciones con sede en la ciudad se distribuyen en tres continentes
17 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Más de cuatrocientos militares, integrados en cuatro barcos de la Armada Española con base en Ferrol, se encuentran desplegados en la actualidad en varios lugares del globo. La fragata Méndez Núñez (F-104), el buque logístico Patiño (A-14) y los patrulleros Arnomendi (P-63) y Serviola (P-71) realizan en este momento labores en aguas internacionales. En conjunto, estas embarcaciones tienen una dotación, según cifras oficiales, de 417 personas.
La Méndez Núñez zarpó el pasado mes de mayo para relevar a la Álvaro de Bazán como buque de mando de la Agrupación Permanente número 1 de la OTAN (SNMG-1). Después de haber participado en el ejercicio Northern Coast en el mar Báltico, la embarcación se encuentra ahora en el puerto polaco de Gdynia.
«Atrás dejamos doce días de navegación en los que no han cesado de acontecer eventos, donde el enemigo tiene mucho que decir», destacan desde el buque sobre el ejercicio en aguas del Báltico, que finalizó este jueves. Hasta 38 unidades de ocho países diferentes realizaron maniobras con el objetivo de mejorar la interoperabilidad entre las fuerzas marítimas participantes, basándose en un escenario de crisis internacional en aguas cercanas al litoral.
El BAC Patiño, por su parte, está inmerso en un despliegue de dos meses y medio en el que presta apoyo a la Marina Real Canadiense. Esta semana comenzó su participación en el Cutlass Fury, un ejercicio antisubmarino de gran envergadura en el que también están, además de España y el país norteamericano, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña y Alemania.
Inmersión lingüística
Antes de empezar este ejercicio, entre el 8 y el 12 de septiembre, el buque visitó la ciudad de Halifax, donde subieron a bordo 20 marinos de Canadá que están siendo adiestrados por sus homólogos españoles. Por el momento, las dotaciones de los dos países se comunican con jerga marinera y números, pero los integrantes del Patiño aguardan que aprendan español. «Todo se andará», aseguran, y subrayan que son dos meses de inmersión lingüística «por los que muchos pagan una fortuna».
El Arnomendi, el último en formar parte de la base de Ferrol, se encuentra en aguas del Atlántico Noroccidental realizando labores de inspección y vigilancia pesquera. El patrullero participa en una campaña de la Organización de Pesca del Atlántico Noroeste (NAFO).
El pasado martes, el barco atracó en el puerto de St. John’s en Terranova (Canadá). A menos de dos semanas de las elecciones gallegas, la dotación aprovechó la corta estancia en la ciudad para ejercer el derecho al voto. Además, alguno de los integrantes del barco pudo ver fotografías de sus bebés, tras más de una semana sin saber de ellos, y observaron el «gran cambio» que dieron.
Fin de los despliegues
A finales de este mes, la fragata Almirante Juan de Borbón, también con base en Ferrol, sustituirá a la Méndez Núñez al frente de la SNMG-1. Mientras, el regreso del Arnomendi está previsto para el 21 de octubre; el del Patiño, para el 7 de noviembre, y el del Serviola, que viaja ahora a África, para el mes de diciembre.
Por otro lado, a finales de este mes, el BAC Cantabria partirá del Arsenal para integrarse, al igual que el Almirante Juan de Borbón, en la SNMG-1. Ambas se adiestraron en Cádiz.