Pontevedra blindó su centro de golpe, pero Ferrol se plantea hacerlo de forma «paulatina»
23 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Tras las peatonalizaciones puntuales, y no exentas de polémica, de un tramo del Cantón y la de la calle Real durante las 24 horas del día, la hoja de ruta de movilidad del Concello de Ferrol pasa por eliminar los coches en el trazado íntegro de las calles Magdalena y María. Y también en sus perpendiculares. Lo anunció la concejala de Urbanismo, María Fernández Lemos, consciente de que supondrá «un cambio de rutina y un shock» para vecinos y negocios. Será el siguiente paso para construir el modelo de ciudad que busca el nuevo gobierno, que cree que precisará de «valentía política y de la ciudadanía».
Ferrol se miró ayer en un nuevo debate de Foro Voz en el espejo de Pontevedra, una ciudad que peatonalizó su centro histórico en 1999. Y lo hizo de golpe, en apenas unos meses después de que tomase posesión el primer ejecutivo presidido por el hoy todavía alcalde del BNG Miguel Anxo Fernández Lores. Su concejala de Urbanismo, Protección Ciudadana, Servicios y Fiestas, Carme da Silva, rememoraba las claves que les permitieron aplicar lo que hoy es reconocido como un modelo de movilidad, incluso a nivel internacional: «O que hai que ter é un proxecto ben definido». Y buscar el consenso, «que non hai que confundir con unanimidade», advirtió. «Sen o apoio maioritario da sociedade non é posíble sacalo adiante», añadió, recordando que en la ciudad del Lérez también hubo contestación social y que fueron necesarias asambleas «maratonianas» para llegar a un acuerdo.
En Ferrol no se aplicará el modelo Pontevedra. La concejala local apostó por hacerlo de forma «paulatina» para dar tiempo a escuchar a vecinos, comerciantes, hosteleros y todos los sectores afectados. Pero recordó que «la ciudad es para el peatón, no para el vehículo», recordó. «Ningún proceso de peatonalización ha fallado. Además -recordó- no es irreversible. Y ni siquiera hacen falta obras importantes».
En Pontevedra, aseguró Da Silva, los más beneficiados por la medida fueron residentes y comerciantes. Pero los colectivos locales participantes en el debate mostraron ciertas reticencias. No hacia la peatonalización, filosofía que todos aseguran compartir, sino más bien hacia su forma de ejecución.
César Crego, secretario de la Asociación de Vecinos Pedro Padrón, abogó por peatonalizar «bien» las calles ya carentes de tráfico -Real, Galiano y Dolores- «y después preguntar cómo hacemos con el resto. Y racionalizar», advirtió confesando que Pontevedra «me da envidia, pero aquí somos algo bastante diferentes». Para el presidente del Centro Comercial Aberto Ferrol-A Magdalena, Cristóbal García Nores, «el día que se peatonalice hay que hacerlo en conjunto», abogó. Pero para ello, señaló, falta mucho trabajo. «Comenzar la peatonalización de la ciudad colocando macetas... eso tiene que ser al final», reprochó. «Y faltó diálogo», asegura en referencia a lo realizado hasta ahora.
«Si los resultados fuesen los de Pontevedra firmaba ahora mismo», señalaba gráficamente Emilio Vázquez, presidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Ferrol y Comarca, que pidió «más vida» para la ciudad.
Vecinos y negocios reclaman más diálogo y medidas alternativas antes de afrontarlo