«Quisiera insuflar ánimo a Ferrol»

FERROL CIUDAD

ANGEL MANSO

El intérprete ferrolano cierra un año de reconocimientos que supone un salto en su carrera

30 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Javier Gutiérrez (Luanco, 1971) cierra en Ferrol un año redondo. Desde febrero el Goya al mejor actor protagonista reposa en el salón de su casa de Madrid, sacando el lado paparazi de sus amigos. Y se convertirá en la primera persona que en recibir dos veces el premio de Ferrolán do Ano, además de ser nombrado Hijo Predilecto de la ciudad. Salir a la calle en Ferrol significa parar a cada paso: saludos, abrazos, reencuentros y fotos de fans son su rutina diaria en una ciudad que, si bien no lo vio nacer, sí crecer y convertirse en lo que es hoy: un actor de primer nivel. Y el mejor embajador de Ferrol.

-¿Es 2015 el año de Javier Gutiérrez?

-Es un año muy importante. Pero no tanto por los premios. En lo personal no me puedo quejar, pero en lo profesional me da la sensación de que he dado un salto cualitativo por trabajos como La isla mínima o El desconocido. Y más allá de los premios, que a uno le dan cierto prestigio, han hecho que desde directores y productores a los espectadores me vean con otros ojos, porque es cierto que durante muchos años he estado muy emparentado a la comedia y a la televisión.

-Será Ferrolán do Ano por segunda vez en cuatro años. Esto empieza a ser costumbre...

-¡Espero que no! Y sé además de la importancia que tiene que sea por segunda vez. Eso le hace a uno más feliz y también le coloca en otro lugar en cuanto a responsabilidades. Para mí es un colofón maravilloso al año de premios que he tenido. Sé que puede parecer muy manido, pero es el broche perfecto a un año de tanto reconocimiento.

-Pero es que además lo van a designar Hijo Predilecto de Ferrol.

-Me siento hijo de Ferrol. Predilecto ya... Yo amo muchísimo esta ciudad y aporto mi granito de arena para que cada vez vaya mejor.

-A ferrolanismo no hay quien le gane...

-Sí, sí los hay que me ganan. Pero estamos ahí en la lucha... [ríe].

-Dígame algo que no le guste de la ciudad.

-Ferrol lleva sumido en una crisis desde hace un tiempo. Y me gustaría ver un Ferrol más alegre, más activo. Un Ferrol más dinámico y más vivaz, como antes. Pero eso tiene que ver con el paro que hay y que muchísima población se ha ido. Me gustaría insuflar ánimo a los ferrolanos para pudiera volver a ser como era. Sé que es complicado, pero también tiene mucho que ver con la actitud de los gobernantes. Ha habido un cambio de gobierno que supongo que para muchos ciudadanos será ilusionante. Espero que les dejen trabajar y que podamos ir mejorando poco a poco.

-Participa en la obra «El Rey» y hace de Franco en una miniserie. No parecen papeles que encajen mucho con su ideología.

-Sí, bueno, pero no tiene nada que ver. Son personajes con mucha chicha y para un actor son muy golosos. Es muy gratificante poder de repente enfundarse el traje del general Franco y despachar en El Pardo. Es una experiencia particular, digamos.

-¿Monárquico o republicano?

-Republicano. Es más, creo que el rey Felipe VI perdió una oportunidad fantástica de hacer un referéndum y que el pueblo decidiese si quería seguir con una monarquía o no. Estoy seguro de que la mayoría aceptaría una monarquía. Por eso digo que perdió una oportunidad de ser elegido por el pueblo y no por el dedazo de su padre, al que anteriormente el dedazo de Franco colocó como rey.

-¿Qué techo se marca?

-Cuando acepto un guion no pienso si eso huele a premio o no. Son retos, y me gusta como tal afrontarlos. Por eso me meto en la piel de Franco, por eso quiero seguir haciendo teatro, por eso acepto hacer una película en inglés. Uno no va buscando lo acomodaticio, sino nuevos retos y creciendo como actor. Y si a eso le sumas que hay algún trabajo que llama la atención y que gusta al público y a la crítica y que recibes reconocimientos, bienvenidos sean. Pero los premios no traen más trabajo. De hecho hay muchos compañeros que ganan Goyas y se quedan estancados durante un tiempo. Sin saber por qué, deja de sonar el teléfono. Es curioso.