Cinismo culposo

José Varela FAÍSCAS

FERROL CIUDAD

27 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Es difícil explicar una situación social como la que vivimos sin la existencia de un sólido pacto culposo y despreciable con los corruptos. Hacienda ha difundido la nómina de defraudadores fiscales de más de un millón de euros y la relación ronda los cinco mil nombres. Como el fenómeno de sinvergonzonería es transversal, entre los distinguidos morosos (de momento) encontramos conspicuos estafadores y cuatreros junto a personajes de idéntica moral líquida pero muy populares y, para una parte de la población, modelos de referencia para sus hijos, como deportistas o charlatanes de feria. Quiere decirse que hay parados sin subsidio que no ven contradicción en seguir admirando las piruetas de sujetos que son los causantes de su drama personal, aunque, eso sí, no tienen duda en afirmar que los políticos son todos iguales o que las multas que impone la Guardia Civil por conducir borracho son una argucia recaudatoria. Pero la medalla de oro en este campeonato del cinismo es para Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda. Como sabe de qué paño está hecho el tejido social, hace pública la lista de morosos pero no aumenta los medios de la Agencia Tributaria para que esa lista sea triturada por los inspectores fiscales. Sabe Montoro que el morbo voyerista es más poderoso que la rectitud moral: se mira la lista de defraudadores, se hace un chiste en el bar, y a otra cosa, aunque esa realidad explique por qué no hay más ayudas a la dependencia o más becas de estudio. Por trasladarlo a Ferrol, es como si nos quejamos de que no reparen los baches pero queremos que sigan financiando las procesiones de la Semana Santa.